Castilla-La Mancha reduce su deuda y se sitúa en el 28,5% del PIB en el tercer trimestre
Castilla-La Mancha continúa avanzando en la reducción del peso de su deuda pública en relación con su Producto Interior Bruto (PIB), de acuerdo con los datos publicados este lunes por el Banco de España correspondientes al tercer trimestre de 2025. La comunidad autónoma ha situado su ratio de deuda en el 28,5% del PIB, lo que supone una mejora sostenida respecto a ejercicios anteriores, aunque la mantiene entre las regiones con mayores niveles relativos de endeudamiento.
Desde junio de 2015, cuando el peso de la deuda alcanzaba el 35,4% del PIB, Castilla-La Mancha ha logrado reducir este indicador en cerca de siete puntos porcentuales, una caída que más que duplica la registrada en el conjunto de las comunidades autónomas, donde el descenso ha sido de 3,3 puntos en el mismo periodo. Con esta evolución, la región se sitúa como la tercera comunidad que más ha reducido su deuda desde el inicio del mandato del presidente Emiliano García-Page.
La mejora también se aprecia en términos interanuales. En los últimos doce meses, el endeudamiento regional ha pasado del 29,8% del PIB en septiembre de 2024 al 28,5% en septiembre de 2025, lo que supone una reducción de 1,3 puntos porcentuales. De nuevo, Castilla-La Mancha ocupa el tercer puesto nacional en este indicador, por encima de la media autonómica, que ha descendido un 0,8% en el mismo periodo.
Asimismo, respecto al trimestre anterior, entre junio y septiembre de 2025, la deuda autonómica se ha reducido en un 0,6%, en línea con la media nacional. Esta evolución se refleja también en términos absolutos, ya que el importe total de la deuda de Castilla-La Mancha se ha reducido en 130 millones de euros, según los datos del Banco de España.
Pese a esta trayectoria descendente, Castilla-La Mancha continúa figurando entre las comunidades con mayores niveles relativos de deuda. Solo la Comunidad Valenciana, con una ratio del 40,5%, y la Región de Murcia, con un 30,2%, presentan porcentajes superiores. A continuación se sitúan Castilla-La Mancha, con ese 28,5%, y Cataluña, con un 28,4%.
En el extremo opuesto, cinco comunidades autónomas mantienen su ratio de deuda por debajo del 13% del PIB, umbral de referencia establecido en la Ley de Estabilidad Presupuestaria: Navarra (9,9%), Canarias (10,8%), Madrid (11,5%), País Vasco (11,8%) y Asturias (12,6%).
Los datos del Banco de España reflejan, además, que la deuda del conjunto de las administraciones públicas ha superado por primera vez los 1,7 billones de euros en el tercer trimestre del año, aunque ha moderado su peso sobre el PIB hasta el 103,2%. Esta cifra se sitúa dos décimas por debajo del segundo trimestre de 2025 y un punto menos que en el mismo periodo de 2024, si bien continúa por encima del nivel registrado al cierre del pasado ejercicio.
El Gobierno central prevé que la ratio de deuda sobre PIB se reduzca hasta el 101,7% al cierre de 2025 y continúe descendiendo en los próximos años, hasta el 98,4% en 2027, el 90,6% en 2031 y el 76,8% en 2041, aunque las proyecciones no concretan cuándo se alcanzará el umbral del 60% considerado prudente por la Unión Europea.
Por subsectores, la deuda de la Administración Central se situó en 1,571 billones de euros en septiembre de 2025, el 94,8% del PIB, mientras que la de las comunidades autónomas ascendió a 338.804 millones de euros, equivalente al 20,4% del PIB, por debajo de los niveles del trimestre anterior y del mismo periodo de 2024. En términos interanuales, la deuda autonómica creció un 1,7%, aunque descendió un 1,2% respecto al segundo trimestre.
En cuanto a las corporaciones locales, su deuda se redujo hasta los 22.477 millones de euros, el 1,4% del PIB, un 2,8% menos que un año antes. Por su parte, la deuda de las Administraciones de la Seguridad Social alcanzó los 126.173 millones de euros, un 8,6% más en términos interanuales.
El Banco de España destaca también que la deuda se concentra mayoritariamente en pasivos a largo plazo, que representan el 95,3% del total, con un peso destacado de los valores a largo plazo, que suponen el 84,8%, mientras que la deuda a corto plazo se limita al 4,7%.
Desde el Ejecutivo autonómico subrayan que esta evolución permite compatibilizar unas finanzas públicas saneadas con el compromiso del presidente Emiliano García-Page de no escatimar recursos públicos en la atención a los colectivos más vulnerables y en el impulso de la actividad económica en Castilla-La Mancha.
