Castilla-La Mancha ha iniciado el pago de más de 150 millones en ayudas de la PAC

El Gobierno de Castilla-La Mancha ha comenzado a ingresar en las cuentas de agricultores y ganaderos de la región más de 150 millones de euros correspondientes al saldo de la Política Agraria Común (PAC) de la campaña 2025. El montante, que se irá haciendo efectivo a lo largo de todo el mes de diciembre, constituye el segundo pago más relevante del ejercicio tras el anticipo del 70 % abonado el pasado 16 de octubre. Con esta nueva remesa, el sector agrario castellano-manchego habrá recibido ya 532 millones de euros en lo que va de campaña.

En paralelo a la activación de estos pagos, el Ejecutivo autonómico ha reiterado un mensaje de confianza a los consumidores y al propio sector ganadero ante la aparición de casos de peste porcina africana en la provincia de Barcelona, reafirmando que el consumo de carne de cerdo es completamente seguro y que la situación sanitaria en Castilla-La Mancha es de estabilidad, tanto en el ámbito porcino como en el aviar.

Más de 150 millones para el campo castellano-manchego

El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán, detalló que la orden de pago emitida el pasado 5 de diciembre ha permitido iniciar el ingreso de una primera partida de 98,6 millones de euros. Esta cantidad corresponde a las líneas de ayuda básica a la renta (ABRS), pago redistributivo y ayudas para jóvenes, que alcanzan globalmente a 78.000 agricultores y ganaderos.

La ejecución de este pago, explicó, supone dar continuidad al compromiso expresado por el Gobierno regional de acelerar la llegada de los fondos europeos al campo y garantizar la liquidez de las explotaciones. Martínez Lizán subrayó que este segundo gran ingreso del año responde a la voluntad de “pagar cuanto antes el dinero que corresponde a nuestros agricultores y ganaderos”, cumpliendo con el calendario anunciado al comienzo de la campaña.

A partir del 12 de diciembre, está previsto el abono de 38,3 millones de euros adicionales destinados a eco-regímenes, una línea que beneficiará a 70.000 expedientes y que compensa prácticas agrarias sostenibles, voluntarias y orientadas a la mejora ambiental. En este paquete se incluyen medidas como la rotación de cultivos, la siembra directa, la implantación de cubiertas vegetales o inertes en cultivos leñosos, la siega sostenible, el pastoreo extensivo y la creación de islas y márgenes de biodiversidad. “Los eco-regímenes retribuyen el esfuerzo que los agricultores y ganaderos realizan de forma voluntaria en favor del clima, del medio ambiente y del bienestar animal”, señaló el consejero.

Ese mismo día se activará también el pago de 4,6 millones de euros correspondientes a las ayudas asociadas de superficie, con más de 40.000 expedientes vinculados a cultivos proteicos, frutos secos, olivar con alto valor medioambiental o ubicado en zonas desfavorecidas, y arroz sostenible. Tras esta transferencia, se culminará el ciclo de pagos con un último tramo de 10 millones de euros dirigidos a las ayudas asociadas a la ganadería, destinadas tanto al bovino de leche y carne como al ovino y caprino en ambos tipos de producción.

Al cierre del mes de diciembre, el acumulado de transferencias alcanzará los más de 150 millones de euros, situando la cifra global de la PAC 2025 ya ingresada en 532 millones de euros. Martínez Lizán subrayó que estos niveles de ejecución “ponen de manifiesto la importancia de estas ayudas para garantizar la rentabilidad de nuestras explotaciones”, así como la necesidad de “pelear en la negociación de la futura PAC a todos los niveles y al máximo nivel”.

En esta línea, recordó que el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, participa estos días en una sesión del Comité de las Regiones, donde está defendiendo la necesidad de modificar la propuesta actual de la futura PAC para evitar pérdidas para el campo castellano-manchego. “Vamos a seguir dando la batalla para conseguir la mejor PAC posible para la región, que no suponga perder ni un euro respecto al modelo vigente”, añadió.

La carne de cerdo es segura y se mantiene la vigilancia ante la peste porcina

A las puertas de la campaña navideña, el Gobierno regional trasladó un mensaje rotundo de tranquilidad respecto a la peste porcina africana (PPA) tras la detección del virus en 13 jabalíes en la provincia de Barcelona, únicos casos confirmados hasta la fecha. Martínez Lizán insistió en que la enfermedad no afecta a las personas, por lo que no existe ningún riesgo derivado del consumo de carne de cerdo.

El consejero explicó que “ya hace varios días que no aparece ningún animal más” y que la presencia del virus se mantiene contenida en la zona donde se detectó el primer foco. “Hay una cautela importante, pero también tranquilidad de que no haya mayor dispersión”, afirmó.

En cuanto a la respuesta administrativa, destacó que se están realizando controles exhaustivos en todas las explotaciones para actuar de manera preventiva y minimizar cualquier impacto potencial. “Se está trabajando coordinadamente entre administraciones, tanto la Generalitat de Catalunya como el Ministerio, para erradicar cuanto antes la presencia de este virus”, añadió.

Martínez Lizán se refirió además al impacto comercial de la PPA y a los esfuerzos en curso para mantener la actividad exportadora del sector porcino español. Detalló que China ha aceptado la regionalización, de modo que las restricciones se aplican únicamente a la provincia de Barcelona. A este enfoque se ha sumado Corea del Sur, que permitirá las importaciones procedentes de toda España salvo en un radio de 20 kilómetros alrededor del foco declarado.

La región mantiene la estabilidad sanitaria y sin casos de gripe aviar desde octubre

El titular de Agricultura también abordó la situación de la gripe aviar, confirmando que desde el mes de octubre no se ha detectado ningún caso en Castilla-La Mancha, “ni siquiera sospechoso”. Recordó la resolución dictada semanas atrás por la Junta que ordenaba el confinamiento preventivo de aves de corral y de explotación, una medida que, aseguró, está dando resultados satisfactorios.

Martínez Lizán insistió en que el cumplimiento estricto de las medidas de bioseguridad, junto con los protocolos de control biológico en explotaciones avícolas y porcinas, “debería seguir funcionando como hasta ahora y evitar nuevos contagios”. Destacó también la coordinación permanente con el RASVE, el sistema estatal de vigilancia sanitaria, y la interlocución continua con el sector ganadero, especialmente con el porcino, al que calificó de “muy profesionalizado y plenamente implicado en la preservación de la sanidad animal”.