Un sector del PSOE y el PP piden cesar a Simón tras cuestionar las primarias de Sánchez

La polémica abierta en el seno del PSOE de Castilla-La Mancha tras las palabras de la consejera de Igualdad, Sara Simón, cuestionando el desarrollo de las primarias socialistas de 2017, ha escalado en las últimas horas hasta convertirse en un nuevo frente político para el Gobierno de Emiliano García-Page. A las críticas de la oposición se ha sumado ahora Izquierda Socialista, corriente interna del PSOE, que ha pedido abiertamente su destitución o dimisión.

Izquierda Socialista pide el cese y amenaza con acudir al Comité de Garantías

La Coordinadora Regional de Izquierda Socialista del PSOE de Castilla-La Mancha ha reclamado al secretario general del partido en la región, Emiliano García-Page, la “destitución inmediata” de Sara Simón o su dimisión voluntaria como miembro del Ejecutivo autonómico. Además, deja abierta la posibilidad de llevar el caso al Comité de Garantías si ni la consejera ni el presidente regional actúan en alguna de estas direcciones.

En un duro comunicado, la coordinadora asegura haber recibido “atónitos la declaración extemporánea y malintencionada” de la consejera en relación con las primarias que devolvieron a Pedro Sánchez Pérez-Castejón a la Secretaría General del PSOE. Un proceso que, subrayan, se desarrolló sin que la militancia dispusiera de “ningún resorte de poder interno federal ni regional”.

Para Izquierda Socialista, las palabras pronunciadas por Simón el pasado viernes en Toledo, al hilo de la reunión en Ferraz de las responsables de Igualdad del PSOE para abordar denuncias internas de acoso relacionadas con el exmilitante y exasesor en Moncloa Francisco Salazar, suenan a una “puñalada de pícara” que pretende reabrir “un falso debate” sobre la legitimidad de unas primarias “ejemplares”, en las que Sánchez ganó “limpia y sobradamente, incluso en Castilla-La Mancha”.

La corriente interna socialista va más allá y emplaza directamente a Page a aclarar si dio alguna orden para alterar el proceso: presionar a militantes, modificar el censo o las papeletas. “Lo cierto y verdad es que usted y solo usted controlaba el aparato del partido”, sostienen, señalando que era el único con los resortes necesarios para garantizar la limpieza de los comicios.

Desde Izquierda Socialista consideran “no conveniente” que Simón, también secretaria de Política Municipal del PSOE regional, “ponga en tela de juicio la democracia interna del partido” para ganar notoriedad personal aprovechando el ruido mediático. “Este bulo de la compañera consejera tiene demasiada cocina y enjundia como para dejarlo pasar”, concluyen.

El PP exige el cese o acudir a la Justicia

El Partido Popular de Castilla-La Mancha ha elevado el tono y ha exigido a Page una decisión inmediata. La secretaria general y portavoz parlamentaria del PP regional, Carolina Agudo, ha afirmado que “si no hubo irregularidades en el PSOE de Guadalajara”, el presidente autonómico debe cesar a Simón por realizar “acusaciones falsas”, y que si las hubo, debe llevarlas “a la Justicia”.

Agudo ha acusado al Gobierno regional de “grave irresponsabilidad” y ha reprochado a la consejera haberse “escondido” tras el “lío” generado, recordando que sus declaraciones tuvieron eco nacional, que el PSOE de Guadalajara las desmintió y que la propia Simón rectificó horas después.

A su juicio, lo más grave no es solo la acusación inicial, sino el silencio posterior del PSOE de Page y que una consejera del Ejecutivo regional haya sido desmentida por su propio partido. La dirigente popular se ha preguntado de qué se arrepiente exactamente Simón: “¿De acusar sin denunciar durante ocho años o de haber lanzado acusaciones falsas?”.

Agudo ha subrayado que “acusar y no denunciar es una irresponsabilidad” y ha cuestionado por qué, si se conocían irregularidades, no se acudió a la Fiscalía durante los últimos ocho años. También ha expresado su preocupación por una posible presión interna para forzar la rectificación de la consejera.

En la misma línea, el presidente del PP de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha exigido explicaciones urgentes a García-Page por las “contradicciones internas” del PSOE regional. “O hay irregularidades y deben ir al juzgado, o no las hay y Page debe cesar inmediatamente a una consejera que se habría inventado denuncias falsas”, ha sentenciado.

Núñez ha enmarcado este episodio en lo que considera un nuevo escándalo del PSOE regional y ha criticado la gestión del Gobierno autonómico, asegurando que 2025 está siendo “un año perdido para Castilla-La Mancha”.

Vox habla de “degradación política y moral”

También Vox Castilla-La Mancha se ha sumado a las críticas. El portavoz del grupo parlamentario en las Cortes regionales, Iván Sánchez, ha denunciado la “degradación política y moral del PSOE” y ha cuestionado los tiempos de la consejera: “¿Por qué tarda nueve años en cantar y solo unas horas en rectificar?”.

Sánchez ha acusado al PSOE de actuar “como una banda mafiosa” que amaña elecciones, tapa irregularidades y guarda silencio durante años, tras las declaraciones de Simón en las que reconocía sospechas de “censos inflados” en las primarias de 2016 en distintas provincias.

El PSOE cierra filas y da el asunto por explicado

Frente a las peticiones de cese, el PSOE de Castilla-La Mancha ha tratado de cerrar la polémica. La diputada regional Paloma Jiménez ha defendido que Sara Simón ya ha explicado sus palabras y ha pedido disculpas, subrayando que se trató de declaraciones realizadas “a título personal”.

Preguntada en varias ocasiones por las críticas de la oposición, Jiménez ha insistido en que la consejera ha reconocido su error y ha explicado por qué hizo esas declaraciones, en las que aludió a la aparición repentina de decenas de militantes en algunas agrupaciones durante las primarias de 2017. Unas palabras de las que Simón se ha arrepentido públicamente al considerar que “no aportan nada” al momento actual.

Pese a las disculpas, la controversia sigue abierta y coloca a Emiliano García-Page ante la presión de sectores internos de su propio partido y de toda la oposición, que reclaman una respuesta política clara tras uno de los episodios más tensos vividos en el PSOE regional en los últimos meses.