Aranceles, una cosecha corta y paquete europeo: un año de contrastes para el vino

El sector vitivinícola ha vivido un año de luces y sombras en los que ha enfrentado retos como guerras arancelarias, una de las cosechas más cortas de su historia y la aprobación de un paquete vino en la Unión Europea que apuesta por el sector europeo y nacional.

En cifras, la cosecha de vino español se redujo a 31 millones de hectolitros; por ahora, en los tres primeros meses de la campaña de 2025/2026, de agosto a octubre, la producción de vino ha bajado un 8,1 % hasta los 27,48 millones de hectolitros respecto al mismo periodo de 2024.

Y del lado del consumo, los españoles lo han reducido un 3,2 %, hasta los 9,5 millones de hectolitros, según los datos de la Organización Interprofesional del Vino de España (OIVE).

Un repaso a 2025

Para el presidente de la OIVE, Fernando Ezquerro, este año ha sido un ejercicio de "contrastes", marcado por un entorno global "complejo" con factores como la guerra de Ucrania, tensiones comerciales y aranceles, en el que pese a todas esas dificultades el sector ha vuelto a demostrar "su fortaleza, capacidad de adaptación y resiliencia".

A juicio de Ezquerro, el paquete del vino europeo "sienta bases sólidas para el futuro" del sector en la UE y en España, una herramienta "fundamental" para afrontar retos estructurales y que frente a la próxima PAC marca una línea clara: "más sostenibilidad, competitividad y mayor alineación con las tendencias del mercado".

Asimismo, ha puesto el foco a futuro, en uno de los grandes vectores de cambio como Mercosur o México, ya que la eliminación de barreras arancelarias en mercados estratégicos es "una palanca clave" para mejorar la posición del vino a nivel internacional, mientras apuestan por las campañas de promoción nacional para acercar la cultura del vino al consumidor.

Por su parte, el director general de la Federación Española del Vino (FEV), José Luis Benítez, ha explicado que 2025 ha sido un año de incertidumbre económica, que también afecta al bolsillo de los ciudadanos, y que se ha trasladado a la comercialización, con una cosecha "muy corta", pero también un año "de esperanza" porque se están tomando medidas para ayudar a mejorar la competitividad del sector.

Según Benítez, el consumo va a terminar con una senda "estable" en el mercado nacional, mientras que las exportaciones están vendiendo menos en volumen pero más en valor, con una mayor demanda de vino tintos.

Para la FEV el paquete del vino de la UE ha dejado "luces y sombras", aunque lo reciben positivamente, y esperan que sirva para "consolidar" a este sector dentro de la nueva PAC.

Por su parte, el presidente de la Conferencia Española de Consejos Reguladores Vitivinícolas (Cecrv), David Palacios, ha recalcado que ha sido una campaña de esfuerzo para el sector en términos de producción y comercialización.

Aún así, ha sido un año de esperanza en el que se han elaborado los mejores vinos de la historia de este país y se puede ir "con la cabeza muy alta".

En términos de consumo, Palacios, ha señalado que el vino es uno de los productos que los consumidores consideran menos necesarios y se va quitando de la cesta de la compra.

Así el vino asume como un mantra la palabra "resiliente", pues está acostumbrado a sortear los obstáculos, mientras sigue apostando en 2026 por la investigación, la innovación y el desarrollo y espera estabilidad comercial.