Preocupación por Carme Chaparro: hay días que no puede ni levantarse de la cama

La periodista y escritora Carme Chaparro ha vuelto a dirigirse a sus seguidores para actualizar su estado de salud después de medio año apartada de los focos. En marzo, la comunicadora tomó la decisión de retirarse temporalmente de la vida pública y profesional para centrarse en un tratamiento médico, sin desvelar en detalle la naturaleza exacta de su dolencia. Desde entonces, sus apariciones habían sido contadas, hasta que este miércoles compartió un mensaje sincero en sus redes sociales en el que refleja tanto la dureza como la esperanza de su proceso.

“Hay días buenos, momentos incluso fantásticos, y otros en los que no saco fuerzas ni para levantarme de la cama”, reconoció Chaparro, que no oculta la montaña rusa emocional y física que ha atravesado en estos meses. Pese a ello, aseguró que empieza a ver la luz al final del túnel: “Ya estamos llegando al final del proceso”.

La periodista, de 52 años, no ha especificado la dolencia concreta, aunque en ocasiones anteriores había relatado que padece síndrome de Ménière, un trastorno que afecta al oído interno y que le provocó una pérdida del 65 % de audición. En cualquier caso, su mensaje se centra en la confianza hacia el equipo médico que la acompaña y en la necesidad de reforzar la investigación en salud: “No hay futuro sin más investigación”, subrayó.

Durante este tiempo, Chaparro también ha afrontado un duro golpe personal, con el fallecimiento de su padre este verano, lo que ha añadido un componente emocional al desafío físico de su enfermedad. Pese a las dificultades, se muestra decidida a recuperar poco a poco su actividad.

Entre las motivaciones que la impulsan a seguir adelante está la inminente publicación de su nueva novela, Venganza, que llegará a las librerías el próximo 17 de septiembre. “Una de las cosas que más impulso me da para levantarme es mi nueva novela… Os espero al otro lado de las páginas”, escribió, visiblemente ilusionada con un proyecto que considera fundamental en esta etapa de recuperación.

Con este testimonio, Chaparro no solo acerca a sus seguidores a su realidad más íntima, sino que también lanza un mensaje de optimismo y perseverancia. La periodista afronta con calma y determinación los últimos compases de un proceso que, según sus propias palabras, está próximo a concluir.