El Gobierno de Castilla-La Mancha quiere a Illa de presidente, pero que no afecte a la financiación
- El Gobierno de Castilla-La Mancha defiende una financiación autonómica que sea “justa y tenga en cuenta la realidad de cada territorio”.
- Alfonso Guerra se alinea con García-Page y otros barones contra el "atropello" del cupo catalán y pide al PSOE una "respuesta contundente".

El vicepresidente segundo del Gobierno de Castilla-La Mancha, José Manuel Caballero, ha manifestado este martes que al Ejecutivo autonómico le "gusta" que Salvador Illa vaya a ser investido presidente de la Generalitat de Cataluña pero que eso no vaya en detrimento de la financiación y recursos económicos de otras regiones.
Así lo ha declarado Caballero en declaraciones a los medios de comunicación durante una visita a la localidad toledana de Consuegra, donde ha reiterado que es una "buena noticia" que Illa vaya a ser el presidente catalán, después de que ERC haya dado su 'sí' al acuerdo con el PSC, porque "es bueno para Cataluña y para España", según ha informado su gabinete.
En este sentido, el vicepresidente segundo ha considerado que "sin duda es una manera de pasar la página del procés" y de que "el sentido común y una manera de hacer política sosegada" se imponga en Cataluña después de tanto "extremismo, frentismo y radicalismo" en el pasado.
Sin embargo, ha añadido que un buen Gobierno para Cataluña, como cree que será el de Illa, "no puede ir en detrimentos de la finaciación y recusos económicos de otras comunidades autónomas", ha sentenciado Caballero.
"ATROPELLO" DEL CUPO CATALÁN
Al respecto se ha pronunciado también este martes el exvicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, que ha instado al PSOE a dar una "respuesta contundente" al concierto económico de Cataluña, pactado con ERC en el marco de la investidura del socialista Salvador Illa, recalcando que es un "atropello" y un "latrocinio que elimina la solidaridad entre los españoles".
"El acuerdo con los independentistas de Cataluña destruye la concepción del Estado que establece la Constitución de 1978. Y lo hace de manera fraudulenta, sin atenerse a las reglas exigidas para cambiar la Constitución", ha asegurado el exdirigente socialista en una entrevista concedida al diario 'El Mundo', recogida por Europa Press.
Para Guerra, el objetivo del concierto económico, que saca a Cataluña de la caja común con otras comunidades, "es favorecer" a unas regiones "en detrimento de otras". A su juicio, "es muy grave" que no haya una "respuesta contundente" del PSOE. "Los socialistas no pueden apoyar un latrocinio que elimina la solidaridad entre los españoles; los socialistas no pueden amparar la desigualdad", ha defendido.
El exvicepresidente ha recordado que el PSOE se convirtió en "el partido de los andaluces" cuando defendió la igualdad en el referéndum de 1981. "Si ahora los socialistas no impiden este atropello estarán trabajando para la derecha, les regalará al PP convertirlo en el partido que defiende a los andaluces", ha avisado.
Guerra ha reprochado las palabras del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien defendió que el pacto ERC-PSC es un paso "incuestionable" en la "federalización" del estado autonómico, pues, en su opinión, "no dicen la verdad". "Es un camino hacia la confederación, hacia la independencia de Cataluña", ha alertado.
En este sentido, el exvicepresidente ha reconocido situarse muy cerca de otros dirigentes del partido, como Emiliano García-Page (Castilla-La Mancha), Javier Lambán (Aragón) o Miguel Ángel Gallardo (Extremadura); los barones del PSOE más críticos con un concierto catalán.