Denuncian a los ocupas de un bloque y son los vecinos los que se tienen que ir

Los problemas se han intensificado los últimos meses
Denuncian a los ocupas de un bloque y son los vecinos los que se tienen que ir
Denuncian a los ocupas de un bloque y son los vecinos los que se tienen que ir

Según recoge El Caso, tener un edificio abandonado al lado de casa se puede convertir en una pesadilla. Eso es lo que les ha pasado a los vecinos que viven al lado del bloque que se encuentra en el número 13-15 de la Ronda Ferran Puig de Girona. Todo empezó hace un año, cuando varias personas ocuparon veintisiete viviendas del edificio. Aunque al principio los Mossos d'Esquadra y la Policía Municipal de Girona intentaron echar a los ocupas debido a las malas condiciones de la estructura, algunas personas no quisieron marcharse de lo que ya consideraban su nuevo hogar.

Según El Diario de Girona, los vecinos denuncian que durante este año la convivencia ha ido empeorando a medida que han ido pasando las semanas, empezando por presenciar conflictos en la calle relacionados con el tráfico de drogas o poner la música a un volumen muy alto durante el día y hasta altas horas de la madrugada y dicen que una cosa son días puntuales como "los sábados, ferias, o el verano, y otra es tener la música alta cada día". Encima, denuncian que por mucho que llamen a la policía cuando los agentes se marchan vuelven a tener comportamientos inapropiados.

Los problemas se han intensificado los últimos meses cuando en el mes de mayo denunciaron los hechos y empezó a recibir amenazas por partes de los ocupas. Los afectados pedían que "los dejaran dormir" y ahora se encuentran con una serie "de ataques" como "llamen al timbre de madrugada, hayan intentado forzar la puerta o no puedan salir a la terraza porque son increpados por los ocupas". Eso ha provocado que dos de los siete inquilinos del edificio contiguo al bloque ocupado se marchen el próximo septiembre a causa de los ruidos, pero indican que otros vecinos también se están planteando marcharse.

El edificio ha sido desalojado tres veces

Esta semana era la tercera vez que se produce un desalojo en el bloque de pisos, que según los vecinos del edificio del lado no ha servido para nada, ya que "una vez se produce la actuación, los ocupas vuelven a entrar, aunque los operarios destrozaran el inmueble para que no se pudiera vivir. "Parece que sean intocables", por eso, los vecinos afectados se sienten "desamparados".

Las personas desalojadas, por su parte, se quejan de que "no han recibido en ningún momento ninguna notificación por parte del ayuntamiento" y que han enviado dos cartas al consistorio buscando una solución, pero no han obtenido respuesta. Dicen también que "son gente normal y trabajador", aunque reconocen que han provocado "pequeños conflictos derivados del tráfico de drogas".

El bloque ocupado, además, tiene graves problemas estructurales y según la revisión del Plan General del año 2002, tendría que haber sido derribado, una acción que no se ha llevado nunca a cabo, ya que tiene que ser iniciativa de la propiedad del edificio.

La degradación de la zona

Tanto los vecinos afectados como otros residentes de esta zona de la ciudad que se encuentra junto a las vías del tren destacan que "en poco tiempo la zona se ha degadado mucho", y denuncian "peleas a plena luz del día, robos e incluso un apuñalamiento" que se produjo a principios de julio, y coinciden en que "cada vez hay más temor a la hora de acercarse a la ronda de Ferran Puig".

Comentarios
clm24.es/admin: