El Guadalajara firma su primera victoria en casa con una remontada vibrante (36-30)

El SANICENTRO BM Guadalajara logró su primera victoria de la temporada en el David Santamaría tras superar por 36-30 a un Bada Huesca intenso y competitivo. Un partido de ritmo alto, decidido por la exhibición goleadora de Ahmed El Khouga y la solidez defensiva en la segunda mitad, que confirma la recuperación del conjunto alcarreño en la Liga ASOBAL.
Guadalajara firma su primera victoria en casa con una remontada vibrante (36-30) - Fotografía: Santi Molina
Guadalajara firma su primera victoria en casa con una remontada vibrante (36-30) - Fotografía: Santi Molina

El David Santamaría vivió este domingo una tarde de balonmano vibrante, marcada por la emoción, la exigencia y el deseo del SANICENTRO BM Guadalajara de regalar por fin una victoria a su afición. El equipo de Juan Carlos Requena, que comenzó a remolque y sufrió para ajustarse al ritmo de un Bada Huesca muy acertado en el arranque, terminó imponiéndose con autoridad gracias a una segunda mitad de alto nivel, sustentada en las intervenciones de Nico bajo palos y en la inspiración ofensiva de Ahmed El Khouga, autor de 13 tantos.

Un inicio adverso con un Huesca más efectivo

El encuentro arrancó con un Bada Huesca superior en los primeros minutos, imponiendo su velocidad en ataque y aprovechando las imprecisiones locales. Con apenas cuatro minutos disputados, el marcador ya reflejaba un 2-4 que obligaba al Guadalajara a remar desde el principio.

El portero visitante Ben Tekaya empezaba a marcar diferencias con paradas de mérito, y en el minuto 10 los oscenses mantenían el mando (4-6) en un intercambio frenético de ataques donde el balón pasaba de una mano a otra a gran velocidad.

El ritmo era tan alto que cualquier error tenía consecuencias. Gabor Decsy, que entró para un penalti, detuvo el lanzamiento de Fabio Chiuffa, un gesto que reforzó aún más la confianza oscense. La brecha llegó a ser preocupante: 6-11 en el 17:26, obligando a Requena a pedir tiempo muerto para reorganizar líneas y frenar el impulso visitante.

En medio de esta fase, la lesión de Yoel Morales, retirado en camilla, añadió tensión al encuentro. Aun así, el Guadalajara empezó a encontrar soluciones ofensivas a través de El Khouga, mientras Joan Blanco asumía el control del ataque para ordenar un juego que comenzaba a fluir con más claridad.

La apuesta por el doble central da aire antes del descanso

Requena introdujo una variación táctica clave: la presencia simultánea de Joan Blanco y Velasco como centrales. Esta estructura permitió una circulación más dinámica y un abanico mayor de opciones ofensivas.

El Guadalajara aprovechó la mejora para acercarse, situándose a un gol a quince segundos del descanso, pero un tanto postrero de Charly Pérez dejó el marcador en 15-17 al intermedio.

El partido cambia tras el descanso: defensa firme y seguridad en el ataque

La reacción definitiva llegó tras el paso por vestuarios. A los dos minutos, el conjunto morado ya había igualado el duelo (17-17) y, poco después, una parada crucial de Nico García permitió a Marcos Dorado culminar la remontada con el 18-17.

El giro emocional fue evidente. Guadalajara se volvió más agresivo en defensa y más preciso en ataque, llegando a colocarse 20-18 pese a las numerosas sanciones que seguían castigando a los locales.

Huesca, sostenido por los penaltis, llegó a ponerse de nuevo por delante (22-23), pero los morados respondieron con carácter para devolver la igualdad al marcador, alcanzando el 27-27 cuando restaban diez minutos y el encuentro entraba en su fase decisiva.

El Khouga lidera la ofensiva y Chiuffa sentencia un triunfo incontestable

El tramo final fue un ejercicio de madurez del SANICENTRO BM Guadalajara. Ahmed El Khouga, en una actuación sobresaliente, siguió perforando la portería rival con lanzamientos potentes y precisos.

La defensa local se compactó y Nico García continuó interviniendo con seguridad, frenando las intentonas de Huesca y manteniendo el pulso del equipo.

Con el 31-29 en el electrónico, Guadalajara aceleró el ritmo: transiciones rápidas, ataques bien elaborados y decisiones inteligentes en cada posesión.

En los instantes finales, Fabio Chiuffa, desde los siete metros, ejecutó el penalti que cerró el partido en 36-30, desatando la celebración de un pabellón que llevaba semanas esperando sumar en casa.

Ficha técnica

36 – SANICENTRO BM GUADALAJARA (15+21): Nico García (Jorge Blanco, David Vladić); Juan Jodar (2), Ahmed El Khouga (13), Martín Ganuza (1), Dániel Fekete, Gonzalo Velasco (4), Marcos Dorado (3) -siete inicial-; Diego Vera (3), Fabio Chiuffa (4), Joan Blanco (2), Santi Simón (4), Álvaro Sánchez, José Luis Román y Dani Calvo.

30 – BADA HUESCA (17+13): Fradj Ben Tekaya (Gabor), Óscar García (4), Nacho Suárez (2), Charly Pérez (7), Artur Parera, Frank Cordiés (2), Samu Cordiés (1) -siete inicial-; Yoel Morales, Dani Pérez (9), De Souza, Alfonso, Lorenzo Nasarre, Tchitombi Aurelien-Morgan (5), Nenadic y Amjad.

Parciales: 2-4, 4-6, 6-9, 7-11, 11-14, 15-17 (descanso), 18-18, 21-20, 23-24, 27-27, 31-29, 36-30.

Árbitros: Alberto Macías de Paz y Ernesto Ruiz Vergara. Excluyeron a Marcos Dorado, Fekete y El Khouga; por Huesca, a Parera y Nenadic. Amarillas para Juan Carlos Requena y Juan Jodar.

Incidencias: Partido de la jornada 12 de la Liga NEXUS Energía ASOBAL, disputado ante 1.083 espectadores en el Pabellón Municipal David Santamaría. Homenaje previo a Mateu Castellá, exjugador del club durante cinco temporadas.

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