Un conductor drogado y ebrio pone en riesgo la vida de su hija menor de 16 años

Según recoge El Caso, si siempre se tiene que circular siguiendo todas las medidas de seguridad posibles, cuando se llevan menores en el coche todavía más. Eso, sin embargo, un vecino de Feliu de Llobregat de 48 años parece que no lo ha acabado de entender. Hace unos días, en torno a las cuatro de la tarde, se saltó un radar situado en un control de Mossos en el kilómetro 181 de la autopista AP-7, a su paso por la localidad de Martorell, en el Baix Llobregat (Barcelona). Aunque se trata de un tramo marcado a un límite de 120 km/h, el cinemómetro registró que estaba circulando a 184 km/h.

Los Mossos persiguieron el vehículo hasta que lo pudieron parar. Los agentes identificaron el conductor, momento en que ya saltó la primera sorpresa de la tarde. El hombre solo tenía carné para conducir ciclomotores, así que no tenía la licencia necesaria para estar al volante de un turismo. Cuando le hicieron las correspondientes pruebas de alcoholemia y drogas, también dio positivo en las dos. En la de alcoholemia el resultado fue de 0,66 mg/l, cosa que supone un delito penal, mientras que en el test de drogas salió que había consumido tanto cocaína como marihuana.

Así pues, el hombre no solo cogió el coche sin carné y excedió con creces la máxima velocidad permitida, sino que además lo hizo estando bajo los efectos del alcohol y las drogas. Una situación en qué no solo puso en riesgo su vida, sino también la del resto de usuarios de la vía y la de dos menores que iban con él al coche, concretamente su hija de 16 años y un amigo de esta de la misma edad. Por todo ello, el hombre, de nacionalidad española, fue detenido como presunto autor de un delito de conducción temeraria.