Es de las cantantes más famosas de España, una deuda la arruinó: "Perdimos todo"
Ana Belén, una de las cantantes más reconocidas del panorama musical español, ha revelado con toda sinceridad un capítulo oscuro de su trayectoria junto a su esposo, el también artista Víctor Manuel. En una entrevista reciente, la pareja ha compartido con detalle las consecuencias de una deuda que amenazó con desmantelar su estabilidad financiera y personal.
El origen de la crisis
La raíz de la crisis se gestó a finales de los años 80 y principios de los 90, cuando ambos decidieron emprender un proyecto cinematográfico. Fundaron una productora que apostó por películas protagonizadas por figuras relevantes como Isabel Pantoja. El filme Yo soy esa (1990) se convirtió en un éxito, pero este triunfo inicial no fue suficiente: la continuidad del modelo empresarial exigía varios éxitos, y los ingresos fueron insuficientes para sostener el proyecto.
Ana Belén recordó con crudeza ese periodo: “Todo lo que ganamos en la productora lo perdimos y teníamos deudas, muchas deudas”. La situación la llevó a admitir que “no fui nada feliz en esa época”.
Víctor Manuel, por su parte, describió el impacto económico y emocional: “Me arruiné completamente. Perdí todo el dinero que tenía y lo que no tenía. Estuve pagando con mis derechos de autor, de la Sociedad de Autores, durante años las deudas que tenía del cine”.
Una aventura empresarial con consecuencias profundas
El fracaso de la productora fue más que un revés económico: en su testimonio, Ana Belén define esa etapa como “una época jodida, terrible, funcionó fatal”. La presión financiera minó también su vida personal: el matrimonio atravesó un momento delicado en el que se vieron forzados a permanecer unidos sin culparse mutuamente. “Fue muy difícil, porque no podíamos echarnos nada en cara”, reconoció la cantante.
La música como vía de recuperación
Frente a la adversidad, la pareja apostó por lo que mejor sabían hacer: crear música y volver a los escenarios. Víctor Manuel retomó las composiciones y los conciertos, mientras que Ana Belén se enfocó en su carrera artística, como vía para recuperar el equilibrio económico y emocional.
Los frutos de ese esfuerzo comenzaron a verse durante los años noventa, con giras exitosas que marcaron un antes y un después. Las giras Mucho más que dos (1993) y El gusto es nuestro, fueron claves para saldar las deudas y restablecer su reputación en el panorama musical español.
Lecciones de una etapa difícil
Más allá de la superación económica, esta experiencia dejó una enseñanza clara para la pareja: la perseverancia y el compromiso con su pasión por la música pueden servir como salvavidas incluso en los momentos más críticos.
Actualmente, Ana Belén y Víctor Manuel consolidan una sólida trayectoria artística y económica. Recientemente, Ana Belén lanzó un nuevo álbum, Vengo con ojos nuevos, acompañado de una gira internacional, con la que continúa consolidando su legado.
