El Hospital de Toledo incorpora un método de lectura digital de pruebas cutáneas

El servicio de Alergología del Complejo Hospitalario Universitario de Toledo, dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, ha incorporado un novedoso método de lectura digital (Nexkin DSPT) de pruebas cutánea con aeroalérgenos, alérgenos alimentarios, medicamentes y venenos de himenópteros.
El jefe de servicio de Alergología, el doctor Carlos Senent, ha indicado que esta nueva tecnología mejora la eficiencia clínica asociada a la realización de las pruebas cutáneas, ya que racionaliza el trabajo médico y de enfermería aumentando la precisión diagnóstica, la trazabilidad de los resultados y el almacenamiento y explotación de datos, según ha informado la Junta por nota de prensa.
En este sentido, ha manifestado que la lectura manual de las pruebas cutáneas conlleva 19 pasos desde el momento en que el facultativo solicita las pruebas, hasta que estas quedan registradas, mientras que con el scan Nexkin DSPT se reduce a cinco sin necesidad de que los profesionales tengan que desplazarse por las distintas consultas del servicio de Alergología.
El facultativo solicita desde su terminal las pruebas que requiere el paciente, que se reciben en una tablet, en el área de enfermería, a través de una red wifi generada por el sistema. Una vez que la enfermera ha procesado y realizado las pruebas, a los 15 minutos, la tablet avisa para que el paciente acuda a la lectura de las mismas. El paciente coloca el brazo bajo el arco del dispositivo y en cinco segundos se realiza la lectura mediante barrido láser, volcándose la fotografía en color y el esquema de los brazos con el contorno de las pápulas de cada alérgeno con su nombre y área en mm2.
Una vez validado el resultado por las profesionales de enfermería, mediante un simple clic, lo remiten al facultativo y queda inserto en el apartado de pruebas complementarias de la historia del paciente.
El jefe de servicio de Alergología ha indicado que actualmente esta tecnología está disponible en España en siete hospitales de la red pública, aunque en ninguno de ellos está integrado en sus sistemas informáticos, como se ha implantado en el Hospital Universitario de Toledo.
A todas las ventajas de este sistema se añade un importante impacto en la mejora medio-ambiental, ya que el consumo de papel es nulo o mínimo, no se marca con tinta el brazo del paciente, se reduce al mínimo el uso de materiales desechables, se minimiza la generación de residuos, los datos se almacenan en la nube y la logística es digital y automática sin desplazamientos ni impresiones en papel. Todo ello contribuye a la reducción de la huella de carbono.
SERVICIO DE ALERGOLOGÍA
El servicio de Alergología cuenta con nueve locales de consultas en la primera planta del Edifico G del Hospital Universitario de Toledo, de los que seis son médicas y tres gabinetes para pruebas funcionales, pruebas cutáneas y estudios de alergia a fármacos y medicamentos. Además, cuenta con consultas en los Centros de Especialidades de Toledo, Illescas y Torrijos.
Asimismo, el servicio dispone en el Hospital Universitario de un área, junto al servicio de Medicina Intensiva, para llevar a cabo los distintos programas de desensibilización que se realizan en la unidad de alergia a fármacos y alimentos.
Realiza, además de las consultas médicas, todas las actividades complementarias necesarias para un adecuado diagnóstico como pruebas cutáneas, estudios de alergia a alimentos, alergia a fármacos, estudios de función pulmonar con test de esfuerzo y test de hiperreactividad bronquial, entre otras muchas pruebas diagnósticas.
Asimismo, desde hace años se lleva a cabo programas de desensibilización a proteínas de leche de vaca y huevo en los niños que han desarrollado alergia persistente y que no hubieran podido tomar estos alimentos en toda su vida, pudiendo realizar dieta libre la inmensa mayoría de los centenares de niños que se han beneficiado de esta terapia.
Se realiza también desensibilización a quimioterápicos en pacientes oncológicos que desarrollan alergia a los fármacos empleados en la terapia anticancerosa y cuyo uso puede suponer la diferencia entre la vida y la muerte. Así como con otros fármacos a los que determinados pacientes se han hecho alérgicos y para los que no existe una alternativa adecuada.
Asimismo, el servicio viene realizando recuentos de pólenes de forma ininterrumpida desde 1994, año en el que se instaló en la azotea del Hospital Virgen del Valle el captador volumétrico de pólenes, al que se sumó en septiembre de 2016 un captador de alérgenos de pólenes.