El verano más secreto de Isabel Preysler: en paradero oculto y rodeada de incógnitas

Según recoge Lecturas, este 1 de agosto fue el cumpleaños de Chábeli Iglesias, a la que cada año felicita en redes sociales su hermana, Tamara Falcó (43 años). Esta tradición se ha convertido en uno de los momentos más esperados del verano, y este año la marquesa de Griñón no ha fallado a su cita, revolucionando las redes con las imágenes que ha compartido, donde podemos ver a una joven Isabel Preysler en bikini. Se trata de fotografías en las que vemos a Tamara y sus hermanos en su más tierna infancia, acompañados en varias de estas de su progenitora, que presume de figura y moreno con unos minúsculos bikinis. Tras ver estas imágenes, una duda ha asaltado nuestras cabezas y es el lugar donde se encuentra ahora mismo Isabel Presyler (74 años), que estaría viviendo uno de sus veranos más discretos.
El verano más misterioso de Isabel Preysler
Tal y como informan desde ‘Look’, sólo su círculo más cercano de familiares y amigos sabr��an el paradero actual de la socialité, a la que ningún fotógrafo ha conseguido retratar esta temporada estival. La que fuese uno de los rostros más habituales en lugares como Marbella o la Costa del Sol está desaparecida por nuestra geografía, comentando otros medios como ’20 minutos’ que esto podría deberse a que Isabel ha hecho las maletas para viajar a Estados Unidos, donde suele ser habitual verla visitando a Enrique Iglesias o Chábeli.
Isabel está muy unida a todos sus hijos, por lo que no es nada raro que gran parte de su tiempo lo pase cerca de ellos, aunque vivan a miles de kilómetros. Este mismo medio también asegura que la reina de corazones podría estar preparando una gran exclusiva de cara al otoño, una en la que se abriría sobre las partes menos conocidas de su vida. A esta discreción ayudan los contactos de la empresaria, ya que el mencionado medio afirma que esta tiene contactos que le permitirían entrar y salir por algunas zonas del aeropuerto de Madrid sin ser vista por los reporteros, aunque también cabe la posibilidad de que todavía se encuentre en la capital y no haya abandonado su lujosa casa en Puerta del Hierro.
Este misterioso verano no es algo nuevo en la vida de la Preysler, que ya el año pasado decidió escapar de los focos españoles para poner rumbo a Miami y estar junto a sus hijos y sus nietos. Tanto Chábeli como Enrique residen en Indian Creek, una lujosa zona de la ciudad estadounidense en la que gozan de mucha privacidad, por lo que no estarían expuestos como en nuestra geografía. Enrique vive allí con su pareja, la ex tenista, Anna Kournikova, y sus tres hijos, los mellizos Nicholas y Lucy, y la menor, Mary, mientras que Chábeli vive con su marido, Christian Altaba, y su hija menor, Sofía.
El reservado momento de Isabel Preysler
Si por algo destaca y ha destacado siempre Isabel es por ser una mujer elegante y discreta, no exponiéndose demasiado y eligiendo muy bien los momentos en los que hablaba para las portadas de diferentes revistas y los eventos a los que acude, lo que hace que su presencia en estos sea mucho más exclusiva.
Es más, esta incluso consiguió pasar desapercibida cuando falleció su expareja, el conocido escrito ganador del premio Nobel, Mario Vargas Llosa, hace unos meses, queriendo conocer todos los medios su opinión y sus sentimientos al respecto, algo de lo que no habló, dejando pasar la tormenta mediática, que se disipó sola.
La aldea del norte de España favorita de Isabel
Como todos sabemos, Isabel nació en Filipinas, llegando a nuestro país cuando era jovencita, ubicándose en Madrid junto a su madre, Beatriz Arrastia. Aunque vivían en la capital, ‘National Geographic’ asegura que una parte de su corazón también estaría en la Comunidad Foral de Navarra, donde tienes raíces por parte de madre en una aldea de menos de 1.000 habitantes, Allo.
Aunque las posibilidades de que se encuentre pasando el verano allí son pocas o ninguna, esta zona del norte siempre será muy importante para Isabel, que parece estar atravesando una de sus etapas más tranquilas a nivel vital.