La Cátedra del Tajo propone nuevas reglas del trasvase con una reserva estratégica

La Cátedra del Tajo propone nuevas reglas del trasvase con una reserva estratégica
El Gobierno de Castilla-La Mancha plantea un cambio decisivo en las reglas de explotación del trasvase Tajo-Segura para garantizar una gestión de los embalses “estable, segura y sostenible”.

El Gobierno de Castilla-La Mancha ha mostrado su respaldo a la propuesta que ha realizado la Cátedra del Tajo para cambiar las reglas del trasvase al Segura que, entre otros elementos, pretende asegurar “una lámina estable en los embalses de cabecera y contar con una reserva estratégica de agua para estar preparados para los abastecimientos de emergencia en situaciones de cambio climático”.

La directora de la Agencia del Agua de Castilla-La Mancha, Montse Muro, ha asistido este miércoles a la presentación del estudio 'Propuesta de parámetros de las reglas de Explotación del Trasvase Tajo-Segura tras la implantación del régimen de caudales ecológicos en el río Tajo', en el marco del ciclo ‘Investigando el Tajo’, según ha informado la Junta de Comunidades en una nota de prensa.

En este contexto, Muro ha afirmado que el Gobierno de Castilla-La Mancha defiende la necesidad de llevar a cabo un "cambio decisivo" en las reglas del trasvase, con el objetivo de garantizar una gestión de los embalses de Entrepeñas y Buendía “estable, segura y sostenible”.

 Muro ha destacado que esta es la segunda propuesta técnica que Castilla-La Mancha plantea al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico para la modificación de las reglas de explotación del trasvase y la aplicación real de los caudales ecológicos tal y como marca el Plan de Cuenca del Tajo.

En este sentido, Muro ha señalado que el Gobierno regional ha ofrecido al Ministerio una "propuesta técnica rigurosa" y basada en una apuesta por un nuevo modelo de gestión “que asegure una lámina estable en los embalses de cabecera y contar con una reserva estratégica de agua para estar preparados para los abastecimientos de emergencia en situaciones de cambio climático”.

Garantizar la sostenibilidad del Tajo y reducir la excepcionalidad en la cabecera

“Nuestro objetivo es claro: garantizar la sostenibilidad del río Tajo y reducir la excepcionalidad hídrica en la cabecera. Esta segunda propuesta supone un paso adelante hacia una gestión estratégica, responsable y coherente con los retos hídricos presentes y futuros”, ha afirmado la directora de la Agencia del Agua.

En esta línea, ha subrayado que la propuesta que ha diseñado la Cátedra del Tajo defiende, entre otras cuestiones, que es posible un modelo que proteja los embalses de cabecera, reduzca la volatilidad del sistema mejorando la seguridad hídrica y respete el caudal ecológico del río.

En concreto, la Cátedra recuerda que aunque el marco legal obliga a revisar las reglas de explotación, la necesidad del cambio responde también a la lógica del funcionamiento del propio sistema, ya que a su entender "no es posible garantizar un régimen estable de trasvases si la cabecera del Tajo no puede ejercer su función reguladora".

De este modo, considera que las reglas actuales no cumplen "su función esencial" que consiste en reducir la excepcionalidad hidrológica y proporcionar estabilidad interanual y por ello aboga por "diseñar reglas eficaces sin modificar la legislación, permitiendo que los embalses recuperen niveles en los años húmedos".

Asimismo, ha sugerido que el volumen trasvasado sea la consecuencia de una buena gestión, no una cifra fijada previamente.

A su entender, centrar el debate en la gestión de la cabecera del Tajo es esencial para evitar diagnósticos distorsionados y garantizar un funcionamiento más estable, realista y sostenible de todo el sistema del Trasvase Tajo-Segura.

Bajo estas premisas, la Cátedra del Tajo UCLM-Soliss ha diseñado unas reglas de explotación, que según su análisis conseguirían estabilizar los trasvases y minimizar las situaciones de excepcionalidad hidrológica, manteniendo los embalses siempre en niveles suficientemente altos para respetar su amplia capacidad de regulación, lo que permite garantizar todos los usos del Tajo en años secos.

En concreto, sugiere que cuando los embalses estén en nivel 1, que se alcanzaría con más de 2.000 hectómetros, se podrían trasvasar 60 hectómetros cúbicos mensuales, mientras que en nivel 2, es decir, por debajo de esa cifra pero por encima de los 750 hm3, se derivarían 10 hectómetros cúbicos al mes.

El nivel 3, que estaría entre los 400 y los 750 hm3, el trasvase mensual sería de 8,6 hectómetros cúbicos y por debajo de los 400 hectómetros en los embalses de cabecera, no se trasvasaría.