Castilla-La Mancha baja la ratio a 22 alumnos y fija 30 en la ESO y 32 en Bachillerato
El Gobierno de Castilla-La Mancha reducirá a 22 alumnos por aula la ratio en segundo curso de Educación Primaria a partir del curso 2026-2027. La medida figura en la resolución publicada este viernes en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha (DOCM), que establece la relación máxima de alumnado por aula en los distintos niveles educativos y da continuidad a la política de reducción progresiva impulsada por el Ejecutivo autonómico en los últimos años.
La resolución concreta que la bajada de ratios se aplicará de forma escalonada en función de la etapa educativa y consolida un modelo que el Gobierno regional considera clave para la mejora del sistema educativo, al permitir una atención más personalizada al alumnado y mejores condiciones de enseñanza en los centros.
Según el texto publicado en el DOCM, para el curso 2026-2027 la relación máxima de alumnos y alumnas por aula quedará fijada en 22 en el segundo ciclo de Educación Infantil, 22 también en primero y segundo curso de Educación Primaria, 25 en el resto de cursos de Primaria, 30 en Educación Secundaria Obligatoria (ESO) y 32 en Bachillerato.
Con esta decisión, el Ejecutivo autonómico cumple su compromiso de extender la reducción progresiva de ratios al segundo curso de Primaria, una de las etapas recogidas en los acuerdos alcanzados con los representantes sindicales del sector educativo.
El consejero de Educación, Cultura y Deportes, Amador Pastor, ha explicado que la resolución publicada “viene a continuar la senda marcada por el Gobierno de Castilla-La Mancha desde la llegada de Emiliano García-Page”, basada en la bajada de ratios en todas las etapas del sistema educativo. En este sentido, ha subrayado que se trata de una línea de trabajo sostenida en el tiempo y vinculada a una estrategia global de mejora de la calidad educativa.
Pastor ha recordado que, cuando García-Page accedió al Gobierno regional, las ratios de alumnado en Castilla-La Mancha eran notablemente más elevadas. En concreto, ha señalado que en aquel momento se situaban en 28 alumnos por aula en Educación Infantil, 30 en Educación Primaria, 36 en Educación Secundaria Obligatoria y 40 en Bachillerato, cifras que, según ha indicado, dificultaban una atención individualizada en las aulas.
En palabras del consejero, la reducción del número de alumnos por aula “permite mejorar la calidad de la enseñanza”, al facilitar un seguimiento más cercano del alumnado, una mejor gestión del aula y condiciones más adecuadas para el desarrollo del trabajo docente.
Desde Ciudad Real, donde ha participado en un acto público, Amador Pastor ha recordado que la bajada de ratios forma parte del acuerdo sindical firmado entre la Consejería de Educación y los sindicatos UGT, Comisiones Obreras y ANPE. Dicho acuerdo establece distintos hitos de mejora educativa, entre ellos la disminución progresiva del número de alumnos por aula y avances en el horario lectivo del profesorado.
En este contexto, el consejero ha asegurado que el Ejecutivo autonómico ya ha cumplido el primer bloque del acuerdo, correspondiente a la Educación Infantil, donde se ha establecido una ratio máxima de 22 alumnos por aula. Este límite, según ha señalado, ya es una realidad en los centros educativos de Castilla-La Mancha y queda reflejado en la resolución publicada en el DOCM.
No obstante, Pastor ha matizado que alcanzar la ratio máxima permitida es una situación poco frecuente en la región. Según los datos aportados, solo el 6% de las aulas de Educación Infantil se sitúa en el máximo establecido, mientras que la mayoría de las unidades presentan cifras sensiblemente inferiores.
De hecho, ha explicado que en muchos centros los grupos se sitúan habitualmente entre 16 y 18 alumnos por aula, lo que pone de manifiesto que la reducción de ratios tiene ya un impacto real en el funcionamiento diario de las aulas y en la atención al alumnado.
El responsable regional de Educación ha insistido en que la bajada de ratios constituye uno de los pilares de la estrategia de mejora del sistema educativo en Castilla-La Mancha. A su juicio, las medidas recogidas en la resolución publicada evidencian el cumplimiento de los compromisos adquiridos por el Gobierno regional y reflejan la voluntad de seguir avanzando en esta línea en los próximos cursos, extendiendo de forma progresiva las mejoras a todas las etapas educativas.
Regulación de las materias optativas en la ESO y Bachillerato
Además, el Diario Oficial de Castilla-La Mancha (DOCM) publica este viernes la Orden de la Consejería de Educación, Cultura y Deportes por la que se regula el diseño, solicitud, autorización y oferta de las materias optativas definidas por los centros educativos en la etapa de Educación Secundaria en la Comunidad Autónoma.
Según recoge la Orden, el objetivo es definir los requisitos y criterios que deben aplicarse en el diseño y formulación de los proyectos de materias optativas, así como establecer los procedimientos para su inclusión en la oferta educativa de los centros y su posterior autorización por parte de la Consejería competente en materia de educación.
En concreto, la normativa regula las materias optativas diseñadas como trabajo monográfico o proyecto de colaboración con un servicio a la comunidad para la etapa de Educación Secundaria Obligatoria, así como las optativas configuradas como proyecto interdisciplinar para los tres primeros cursos de la ESO. Del mismo modo, se establecen los criterios para las materias optativas definidas por los centros en la etapa de Bachillerato.
En función de las enseñanzas autorizadas, los centros docentes podrán ofertar las materias optativas correspondientes conforme a las opciones previstas en la Orden, sujetas a los procedimientos de aprobación o autorización establecidos. En el caso de la ESO, los centros podrán ofertar materias optativas como trabajo monográfico o proyecto de colaboración con un servicio a la comunidad, mientras que las optativas configuradas como proyecto interdisciplinar en los tres primeros cursos de la etapa y las definidas por los centros en Bachillerato requerirán la tramitación de una solicitud específica.
Los centros educativos que deseen ofertar este tipo de materias deberán cumplimentar una única solicitud, disponible en la Sede Electrónica de la Administración de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, con independencia del número de proyectos que se propongan.
Con carácter general, el plazo de presentación de solicitudes se extiende del 1 de septiembre al 31 de enero del curso anterior al de la implantación de las nuevas materias optativas. No obstante, de manera excepcional para el curso 2025-2026, el plazo permanecerá abierto desde el día siguiente a la publicación de la Orden en el DOCM y hasta el 10 de abril de 2026.