Castilla-La Mancha alcanza 24 DOP de vino tras la incorporación de Finca Río Negro

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, durante la visita que ha realizado a la Finca Río Negro en Cogolludo (Guadalajara)
Castilla-La Mancha eleva a 24 sus Denominaciones de Origen de vino con la incorporación del Vino de Pago Finca Río Negro, un enclave vitivinícola único situado a 1.000 metros de altitud en la Sierra Norte de Guadalajara. El reconocimiento consolida a la región como la comunidad con más DOP vínicas avaladas por la Unión Europea.

La distinción llega tras más de dos décadas de trabajo en un proyecto familiar que ha devuelto a Cogolludo parte de su tradición vitícola y que ha sido visitado por el presidente Emiliano García-Page y el consejero de Agricultura, Julián Martínez Lizán, quienes destacaron la singularidad del viñedo y su aportación al mapa regional de calidad agroalimentaria.

Castilla-La Mancha alcanzó este 1 de diciembre un nuevo hito en su mapa vitivinícola con el reconocimiento del Vino de Pago Finca Río Negro, ubicado en el municipio guadalajareño de Cogolludo. Con su incorporación, la región suma 24 Denominaciones de Origen Protegidas de vino y se reafirma como la comunidad autónoma con mayor número de sellos vínicos reconocidos por la Unión Europea. A esta cifra se añade la IGP Vinos de la Tierra de Castilla, elevando el conjunto a 25 figuras de calidad vínica.

El presidente regional, Emiliano García-Page, y el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán, visitaron el entorno natural, los viñedos y la bodega de Finca Río Negro para conocer de primera mano los detalles de un proyecto que, desde sus inicios, ha apostado por un modelo de elaboración artesana y por la recuperación de la identidad vitícola de la zona. Ambos subrayaron que este reconocimiento se suma al total de 41 figuras de calidad agroalimentaria amparadas por la marca de garantía Campo y Alma.

La visita contó con la presencia de representantes institucionales y de la propia bodega: el presidente de Finca Río Negro, José Manuel Fuentes; su gerente, Fernando Fuentes; el presidente de la Diputación de Guadalajara, José Luis Vega; la delegada de la Junta en la provincia, Rosa García, y el alcalde de Cogolludo, Juan Alfonso Fraguas. Fue un encuentro en el que el presidente García-Page entregó a la familia Fuentes un cuadro conmemorativo dedicado a la uva Tinto Fragoso, variedad autóctona que la bodega ha recuperado junto al IVICAM y la Universidad de Castilla-La Mancha y que hoy forma parte de algunos de sus vinos.

Un viñedo singular a 1.000 metros de altitud

Finca Río Negro ocupa un enclave aislado y de altura —1.000 metros sobre el nivel del mar—, en plena Sierra Norte de Guadalajara, una ubicación que confiere a la finca un clima, suelo y subsuelo únicos. Este carácter diferencial, unido a la distancia respecto a otros viñedos y denominaciones, ha sido clave para su reconocimiento como Vino de Pago, la máxima categoría de calidad específica que puede otorgarse a una bodega en España y que actualmente solo ostentan 26 proyectos en todo el país.

La bodega produce vinos blancos de Gewürztraminer, envejecidos en sus propias lías, y tintos monovarietales y multivarietales de Tempranillo, Syrah, Cabernet Sauvignon y Merlot, además de incorporar la mencionada Tinto Fragoso, autorizada en 2020 como uva de vinificación gracias a un largo proceso de investigación desarrollado desde el año 2000 por el Instituto de la Vid de Castilla-La Mancha.

Tres décadas de trabajo para recuperar la tradición

La historia de Finca Río Negro arranca hace más de 25 años, cuando la familia Fuentes plantó la primera parcela de una hectárea. La adaptación al ecosistema de montaña exigió paciencia, ensayos y una estrecha observación del terruño. El proyecto evolucionó hasta alcanzar las 44 hectáreas actuales —35 dedicadas a variedades tintas y 9 a blancas—, siempre manteniendo un proceso de elaboración artesanal, la búsqueda de la excelencia y un profundo respeto por la identidad del paisaje.

En 2010 salió al mercado la primera añada de ‘Finca Río Negro 2007’ y, desde entonces, la gama no ha dejado de crecer. Hoy la bodega elabora cuatro tintos —5º Año, Cerro del Lobo, Finca Río Negro y 992— y un blanco de Gewürztraminer, todos ellos reconocidos en concursos nacionales e internacionales. El proyecto cuenta con un equipo técnico encabezado por Xavier Ausàs, asesor enológico desde 2022, y por el ingeniero agrónomo y enólogo Manuel del Rincón.

“Este reconocimiento es fruto del trabajo bien hecho y estoy seguro de que lo mejor está por llegar”, señaló su fundador, José Manuel Fuentes, recordando que las grandes bodegas necesitan décadas para alcanzar plenitud. Su hijo, Fernando Fuentes, insistió en que la distinción supone “el reconocimiento a la singularidad, la calidad y el prestigio” del proyecto.

Un referente para el territorio

Además de su labor vitivinícola, Finca Río Negro mantiene una activa implicación con el entorno, desde su colaboración con la Escuela de Hostelería y Turismo de Guadalajara hasta la promoción de productos locales como el Steak Tartar de Sala, elegido ‘Mejor Plato de Castilla-La Mancha 2025’. La bodega comercializa actualmente sus vinos en más de 20 países, con certificaciones de vino ecológico e IGP.