Roberto Polo admite su descontento por la situación de sus colecciones en Toledo y Cuenca

El coleccionista Roberto Polo ha reconocido que no está “contento” con la situación actual de su colección en las sedes de Toledo y Cuenca, en especial por la falta de opciones para las exposiciones temporales o por obras ajenas que se han incluido en la exhibición, y espera que la situación se pueda solucionar.
Preguntado en una inauguración por el momento actual de las colecciones, Polo ha incidido en que la ubicación de Cuenca, la iglesia de Santa Cruz, no puede acoger exposiciones temporales, y en Toledo hizo dos en su momento, pero desde entonces “no nos lo han vuelto a dar”, y ha calificado la situación de “pasividad total”.
Asimismo, en el caso de la capital regional ha sido muy crítico con la situación de la colección “y porque han tomado lugar exposiciones temporales que yo no he aprobado y con las cuales no estoy de acuerdo”.
En este sentido, ha apuntado también que “una colección es una obra de arte, es una creación de una persona, y más en el caso mío que soy historiador de arte, está formada sobre conocimientos, investigación, etc … Pero han introducido en mi colección obras que yo rechazo, y ahí siguen”.
Ha aseverado que “no puedo ser hipócrita, porque a mí nadie me paga, puedo ser honesto, y no estoy contento”.
En el caso de Cuenca, ha recordado que la ubicación en la iglesia de Santa Cruz era “temporal”, tal y como se recogía en el contrato, hasta su traslado al Archivo Histórico Provincial.
Un proyecto que se vio retrasado por la merma de presupuesto tras la pandemia, y en el que le han ofrecido también como alternativa el convento de Las Petras, pero que de momento no ha avanzado, según el coleccionista.
Reconoce que Santa Cruz es una “joya, pero ahí no hay espacio para hacer exposiciones temporales”, y respecto a las alternativas ha manifestado que es una persona “flexible, lo único es que hay que hablarme con educación, y no soporto cuando se hace abstracción de cuestiones que están por escrito, como si no existieran, y eso no me gusta”.
Polo ha reconocido que es “extraño” que esté haciendo exposiciones en otros museos, pero no pueda hacerlo precisamente en el que lleva su nombre.
RESPUESTA DE CULTURA
Por su parte, el Gobierno de Castilla-La Mancha ha asegurado que seguirá trabajando “codo con codo” con la Fundación Roberto Polo, que gestiona su colección en las sedes de Toledo y Cuenca, para que “la oferta artística y cultural de la misma siga siendo de primer nivel”.
Tras las declaraciones del coleccionista, fuentes de la Consejería de Cultura han dicho a EFE que el Gobierno de Castilla-La Mancha quiere “poner en valor” la colección Roberto Polo expuesta en el convento de Santa Fe de Toledo y en el Santa Cruz de Cuenca.
Estas fuentes han apuntado que se trata de una colección “de calidad y con un gran potencial”, que supone un atractivo turístico importante no sólo para estas dos ciudades, sino para toda la comunidad autónoma.
La Colección Roberto Polo abrió en el antiguo convento de Santa Fe de Toledo en marzo de 2019 y año y medio más tarde en la iglesia de Santa Cruz de Cuenca.
Precisamente el enclave conquense experimentó en 2023 el mayor incremento porcentual de visitantes de entre todos los museos que gestiona la Junta en la provincia, con un 35%, al alcanzar las 13.446 visitas, 3.500 más que el año anterior.
OBRAS EN LA FAP
La Fundación Antonio Pérez, dependiente de la Diputación de Cuenca, acoge la exposición 'Nueve obras maestras', que realiza un recorrido por las artes pictóricas desde el siglo XV al XX pertenecientes a la colección privada de Roberto Polo con obras que visitan por primera vez nuestro país.
Así lo ha destacado la diputada de Cultura y vicepresidenta de la FAP, María Ángeles Martínez, que junto al director, Jesús Carrascosa, y el coleccionista han presentado la muestra que abrirá sus puertas este jueves por la tarde para el público, según ha informado la Institución provincial en nota de prensa.
Martínez ha querido dar las gracias y poner en valor la generosidad del coleccionista para con Cuenca por hacer posible una muestra que supone poner a la Fundación a la altura de museos tan prestigiosos como el Thyssen o El Prado. En este sentido, Polo ha subrayado que se siente encantado de colaborar con la FAP y en esta ocasión se ha buscado una "exposición de gabinete" con autores cuya obra sea escasa en España y al mismo tiempo sean "maestros cruciales en la historia del arte", por lo que decidió que "sería una buena oportunidad para mostrar en España por primera vez obras de los antiguos maestros".
Fruto de esta selección, la sede de la FAP en la capital acoge estas nueve obras "de un valor y calidad que la equiparan con los mejores museos del mundo". Una exposición compuesta por 'Retrato de una joven', de Cosmè Tura; 'El suicidio de Lucrecia', de Lucas van Leyden; 'Escena de la matanza de los inocentes', de Lèon Cogniet; 'Retrato de Giulia Leonardi', de Ferdinand Hodler; 'Cristo', de Emil Nolde; 'Pierrot', de August Macke; 'Naturaleza muerta con el libro 'Poesías' de Ranier Maria Rilke', de James Ensor; 'Calle de pueblo', de Maurice de Vlaminck; y 'Diálogo 1', de Ronnie Elliot.
El experto en arte y filántropo ha destacado que cada uno de estos autores ocupan espacios relevantes en los mejores museos del mundo y que actualmente el único español que comparte obras con las que se pueden ver en Cuenca es el Thyssen-Bornemisza y ha adelantado que en el tiempo que dure la exposición está abierto a ir renovando esta exposición "para que el público pueda ver cosas nuevas" asegurando que "espero seguir colaborando con la Fundación Antonio Pérez sencillamente porque nos apasiona, nos entusiasma y nos divertimos muchísimo".