Opinión

La España desvertebrada

<<La travesura de aquellos "chicos" se ha convertido en la fe de Todo Esto. La superstición monetaria, en la que sólo tiene razón de existir lo que es rentable, es la creencia dominante>>

<<La travesura triunfa en gran parte del mundo. Con un giro de guion tragicómico. El Estado ya no es un problema: se han quedado con él los que lo consideraban un estorbo. El problema ahora para la Oficina de Todo Esto es la sociedad, la resistencia de la "mano común" frente a la "mano invisible".>>
(Contra todo Esto / Manuel Rivas)

Si el bipartidismo corrupto que ha desvertebrado España hemos de considerarlo un mal recuerdo, muchas cosas tienen que cambiar, y en profundidad. No cabe quedarse en la superficie de los gestos.

Crear un alto comisionado contra la pobreza infantil está muy bien pero hay que ir a las raíces de esa pobreza que es la pobreza de los padres. Las "reformas laborales" salidas de la fábrica de la pobreza tienen un único objetivo: multiplicar los trabajadores pobres para concentrar la riqueza en muy pocas manos, en última instancia, crear ejércitos de esclavos.

Acoger a unos refugiados desesperados en riesgo de muerte (riesgo muy real como demuestran miles de cadáveres) nos habría parecido "normal" en otro tiempo más normal, antes de nuestra conversión a la ignominia y la deshumanización.

Y normal y humanitario habría sido no patrocinar guerras como la de Irak, no estafar a pueblos enteros mediante una deuda ajena o amañada, o no dar por bueno un sistema político y económico que genera tanta desigualdad y esclaviza la democracia, esto sí de manera global.

El microcosmos siempre refleja el macrocosmos. Nuestra alma mezquina, reacia a acoger a unos seres humanos desesperados, refleja el alma de nuestro mundo y es síntoma de barbarie que creíamos haber dejado atrás. Un mundo hipócrita, globalizado dicen, pero atomizado y dividido por múltiples y nuevos muros, tan letales y siniestros como los ya derribados. En ese tiempo del derribo ya se construían los nuevos.

En vez de la libertad y los derechos del hombre hemos globalizado el imperio del dinero y su corrupción, hemos multiplicado los apartheid y amurallado los paraísos fiscales, guarida de los rufianes que expolian el mundo.

La España atomizada, desvertebrada, es fiel reflejo de esa desvertebración global en curso.

La Cataluña de Pujol, la Cataluña de antes de la ruptura, era la Cataluña de la corrupción en sintonía perfecta con la corrupción ambiente, la corrupción nacional, la corrupción unida, la corrupción constitucional.

Esa corrupción, consentida, alentada (el pelotazo como virtud e invento "socialista"), trajo la crisis, las distintas crisis coherentes con una misma  estafa, los recortes sociales, y todo ello la ruptura, desde dentro y desde fuera.

De la misma manera, la corrupción sistémica, la corrupción global, trajo la ruptura del pacto social como modelo a instaurar, la desigualdad creciente, y la atomización. No era el fin de la Historia de la Historia consumada, era la Historia dando marcha atrás.

La Historia se ha convertido en una puerta giratoria de sentido retrógrado: con el mismo movimiento con que se expulsa la democracia y los derechos civiles, se acoge y se incorpora la desigualdad y la involución.

Y Todo Esto, todo ese modelo -único y excluyente- con origen en la corrupción política y económica, se camufla con el brillo tecnológico y la excusa tecnócrata.

Si algún pseudosocialismo europeo quiere sobrevivir o tener sentido, tendrá que enfrentarse a su propia mentira y a las consecuencias de sus errores. Habrá que dignificar y fortalecer lo público, guiados por el interés general. Habrá que desprestigiar sofismas como aquel que dice que el Estado es el problema y no la solución. Habrá que anteponer el poder político, democrático, al poder del dinero y la plutocracia.

No ha sido buena idea globalizar esta selva, que ni siquiera tiene la belleza de la selva original, sino que apesta a zoológico, con múltiples ojos vigilando las jaulas.

Aún estamos a tiempo de recuperar el espíritu y el curso de la civilización.

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