Opinión

El peor mayo

El cierre de la economía sigue haciendo estragos en el mercado laboral. Cierto que el tímido inicio de la actividad ha sacado a muchos trabajadores del ERTE y de las listas del paro. Sin embargo, no ha sido suficiente para que se haya vivido el peor mayo de toda la serie histórica. La Seguridad Social anota casi 188.000 afiliados pero, a día de hoy y desde que empezó la crisis sanitaria, cuenta con 800.000 cotizantes menos. El paro roza los 4 millones y el aumento interanual es de casi 780.000, cerca del 26%.

Las desacertadas medidas del Gobierno para hacer frente a un cierre prácticamente total de la economía están detrás del desastre que ya vemos y del que se avecina. La falta de planes concretos sobre sectores claves de la economía ha sido clamoroso. Los planes del ICO para dar liquidez han llegado tarde y mal. Las ayudas a los autónomos han sido un desastre y qué decir de la tramitación de los ERTE, muchos de los cuales aún ni se han pagado. Finalmente, han tenido que contratar a una empresa incapaces, por falta de planificación y recursos económicos y materiales, de hacerlo con los medios del SEPE. Algo parecido ha pasado con el pago de impuestos, que se resume en una bola de nieve que ahora hay que pagar con las cuentas vacías.

Y si las medidas han sido desacertadas, qué decir de los vaivenes y mensajes contradictorios sobre la reforma laboral o la subida de impuestos. La desconfianza y la inseguridad jurídica que está creando este Gobierno dividido está ahuyentado la inversión y no sólo extranjera. Muchos empresarios se van a pensar y mucho si invertir y contratar mientras se aclaran en el Consejo de Ministros. Lo peor en momentos de incertidumbre: crear más. Ya han acabado confesando que el impuesto a los ricos no da para nada y Europa reclama la recaudación de la futura Tasa Google. Además, según datos de la propia Hacienda, en 2019 Montero se saltó todas las reglas fiscales. El peor Gobierno en el peor momento.

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