No hay más ciego que el que no quiere ver, y esa es precisamente la actitud que han decidido adoptar la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, junto a su fiel consejero de Educación, Marcial Marín, a cerca de nuestra universidad regional, la UCLM.
Para refrescar la memoria de los desmemoriados, baste decir que en el año 2010 el anterior gobierno socialista efectuó pagos a todas las Enseñanzas Universitarias por un importe de 102,5 millones de euros, y más de 1.200 millones de euros en los diez años transcurridos entre el 2000 y el 2010. Y todo ese esfuerzo era ridiculizado por una insigne dirigente del PP, Doña Isabel Tocino, que con toda la "frescura" nos ridiculizaba llamando ‘Universidad de Castilla la Monda’ a la UCLM en sus inicios. Estos ‘lindos’ apelativos dan una idea del compromiso del PP con la universidad que ha dado oportunidades a quienes no las hubiera tenido sin su existencia.
Cospedal había prometido por activa y por pasiva que para 2014 la financiación de la UCLM sería suficiente, después de haber sometido a la Universidad a recortes presupuestarios sin parangón que han supuesto el despido de cientos de profesores, el cierre de múltiples proyectos de investigación y la gravísima expulsión del sistema de centenares de universitarios. Después de todo este sufrimiento resulta que todo era mentira.
Tampoco dice la verdad, señora De Cospedal, cuando habla de la deuda socialista, ya que hasta la Junta de Personal de la UCLM ha tendido que aclarar que los 83 millones que el Gobierno de Castilla-La Mancha adeuda a la Universidad corresponden casi íntegramente a su gestión.
Sirva como ejemplo que en 2012 pagó tan solo 46,3 millones a las enseñanzas universitarias, y que en el presente año, a 30 de septiembre la cantidad abonada por su Ejecutivo a las instituciones académicas ha sido de 69,9 millones. Haga pues un sencillo ejercicio de reflexión, consulte los datos oficiales de ejecución presupuestaria y podrá comparar esos importes con los 102,5 millones que se pagaron en el último año gestionado por el anterior presidente, José María Barreda.
Y es para nota que nos digan que la UCLM es la niña mimada de su gobierno cuando no está haciendo más que maltratarla sistemáticamente, llamando incluyo a capítulo al rector con la única intención de amedrentarle e impedir su comparecencia en las Cortes Regionales.
Esta es la única verdad y uno de los motivos que ha llevado al Consejo de Gobierno de la UCLM a dar un golpe encima de la mesa y decir ¡basta ya!
Basta ya porque Cospedal ha situado a la Universidad de Castilla-La Mancha a los pies de los caballos con sus incumplimientos y sus mentiras. Entérese, señora presidenta, no se puede jugar al mentiroso en todo y con todos, y menos aún con cuestiones tan serias como la Universidad.
Tanta mentira, tanta irresponsabilidad y tanto estrujar a la UCLM hasta dejarla en los huesos ha colmado la paciencia de toda la comunidad universitaria, que ha optado por plantarse y anunciar acciones legales para reclamar un dinero que le corresponde, poner en marcha una iniciativa legislativa popular para blindar a la Universidad de los ataques sistemáticos de Cospedal y proponer la comparecencia del rector en las Cortes Regionales, derecho que mucho nos tememos que de nuevo le negará en una maniobra desleal de ponerle la mordaza a la verdad.
Señora De Cospedal, señor Marín: ¿se han enterado ya por qué no protestó antes la comunidad universitaria de la UCLM?
