Un total de trece cultivadores de plantas aromáticas de la provincia de Guadalajara, con una superficie de 401 hectáreas, recibieron ayudas a través del Programa de Desarrollo Rural (PDR).
Este dato lo ha aportado en un comunicado el Gobierno regional, en el que el director general de Desarrollo Rural, Francisco Javier Carmona, ha mostrado el apoyo del Gobierno regional a los productores de la Comarca de Molina que están valorando el cultivo de aromáticas como una manera de diversificar y aumentar la rentabilidad de sus explotaciones.
Carmona ha puesto de manifiesto la importancia que tiene este cultivo en la provincia, ya que de las 2.000 hectáreas dedicadas en el conjunto de la región al cultivo de aromáticas, más de la mitad (1.240) están en Guadalajara.
Hasta el momento, es la zona de La Alcarria la que concentra el grueso de la producción, aunque otros territorios, como la Comarca de Molina están comenzando a impulsar algunas plantaciones.
"Es una zona que también tiene posibilidades", ha indicado el director general de Desarrollo Rural, que se ha referido a que allí las condiciones climáticas, de suelo y de disponibilidad de terrenos son también adecuadas para este cultivo.
Francisco Javier Carmona ha destacado el apoyo del Gobierno regional "a este tipo de cultivos, con un claro componente social" y ha resaltado que se trata de "una alternativa interesante que puede crear empleo y, por tanto, fijar población en comarcas que tienen un grave problema de despoblamiento".
Ha hecho hincapié en la alta rentabilidad de un cultivo que se adapta con facilidad a terrenos rústicos y a tierras calizas, de ahí que haya productores que estén dando el salto a cultivar aromáticas en terrenos antes dedicados al cultivo de cereal de secano.
Asimismo, ha recalcado la importancia de la jornada formativa de hoy, realizada por el Gobierno regional recogiendo las demandas de productores de la Comarca.
"A través de la formación intentamos ofrecer conocimientos a los jóvenes para que se embarquen y emprendan actividades que puedan ser diversificadoras de la economía de nuestro medio rural", ha afirmado.
Ha añadido que una muestra de las potencialidades del cultivo de aromáticas se encuentra en Brihuega y su entorno, donde la rentabilidad de los cultivos se ha visto acompañada por un fuerte impulso turístico y también con la creación de microempresas dedicadas a la venta de productos ornamentales o cosméticos derivados de la lavanda que, además, están gestionadas mayoritariamente por mujeres.
