La presentadora Silvia Fominaya arruinada por hacer negocios con su ex, el chef Sergi Arola

El chef ya ni siquiera cogería las llamadas de la presentadora que no sabe como salir de la grave situación que vive

La presentadora Silvia Fominaya arruinada por hacer negocios con su ex, el chef Sergi Arola
photo_camera La presentadora Silvia Fominaya arruinada por hacer negocios con su ex, el chef Sergi Arola

Según recoge Lecturas, la situación económica de Silvia Fominaya no puede ser más preocupante. La presentadora montó un bar con su ex, el cocinero Sergi Arola y ahora, meses después de haberlo cerrado porque no era rentable, sigue haciendo frente a las numerosas deudas que generó y lo hace en solitario. También se enfrenta a las denuncias de sus extrabajadores que todavía no han cobrado sus últimos sueldos.

Silvia Fominaya se encuentra en una situación de lo más delicada. Según ha relatado una fuente cercana a ella a Corazón, después de que negocio junto a Sergi Arola se fuera a pique, ahora tiene que hacer frente a numerosas deudas y tiene que hacerlo en solitario. "Su primera idea era no meterse en el proyecto, pero entre todos los que estaban involucrados la convencieron. No solo se metió sino que encima lo puso a su nombre porque al de Sergi no se podía. Ella está cansada de llamar a Arola que no le contesta las llamadas ni los mensajes. Su situación es triste. Es para llorar. Le reclaman de la máquina registradora, de los platos, de una conocida marca de cerveza, de todo", explican.

También han apuntado que "Su situación es tremenda. Silvia dice que ojalá nunca se hubiera metido allí. Está muy mal, con muchas deudas que va tapando. Hace verdaderos esfuerzos por mantener el nivel de vida de sus hijos y no puede ni contar la cantidad de deudas que tiene y que va poniendo a plazos. Lo que pasó con ese local ha sido una ruina para ella".

Por suerte, la presentadora está rodando una serie 'Los Miami' con la que espera recuperarse económicamente e ir haciendo frente, aunque sea poco a poco, a toda las deudas pendientes de esta fallida aventura empresarial.

Fuente: Lecturas

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