El nuevo alcalde de Guadalajara, Alberto Rojo, empieza su mandato con el compromiso de “cumplir la palabra dada”, escuchar a los vecinos y buscar el consenso para mejorar la ciudad.
El regidor apenas lleva unos días en el cargo, pero asegura que ya ha recibido “muchas felicitaciones, mucha esperanza y mucha ilusión por parte de la gente”, además de las primeras peticiones de vecinos que le recuerdan lo prometido en campaña o le solicitan otras mejoras para sus barrios, explica en una entrevista con la Agencia Efe.
Rojo ha dedicado sus primeros días a atender asuntos cotidianos del Ayuntamiento y recorrer las dependencias municipales para conocer a los empleados públicos.
Ya ha hablado con su predecesor, Antonio Román, y se han emplazado para, en los próximos días, tener "una conversación tranquila sobre la ciudad”, ha señalado.
Entre sus prioridades está la conformación de la nueva estructura orgánica del Ayuntamiento que en los próximos días se llevará a efecto, los órganos de gestión de las concejalías, la Junta de gobierno así como la representación en otras instituciones como mancomunidades “para realizar una gestión municipal eficaz y adecuada”, ha dicho.
Sobre las competencias que tendrán sus socios de C's, Rojo ha señalado que están hablando actualmente y que se conocerán, como el resto de concejalías, en los próximos días.
Rojo es claro en señalar que su gobierno es de “coalición, en el que el equipo de Gobierno estará integrado por 13 personas, la mayoría absoluta del pleno, y conformado por dos fuerzas políticas, PSOE y Ciudadanos”.
“Creo que este es el mejor modelo que necesitaba la ciudad de Guadalajara porque tiene tres claras características: estabilidad, regeneración y ganas de cambio”, y ha añadido que él trabajará para buscar acuerdos con los 25 concejales de la Corporación.
Comenta que las negociaciones con C's se hicieron “pensando en las personas por delante de todo. Hablando de los programas”, y ha agregado que tanto los concejales de PSOE como de C's han hablado "con sensatez y realidad poniendo a los ciudadanos por delante de todo”.
Una vez estén en marcha los órganos de gestión, sus prioridades serán analizar la situación financiera del Ayuntamiento y escuchar a los vecinos.
“Tenemos que atender una serie de reflexiones que hemos hecho en los meses pasados como es empezar a escuchar a los vecinos, a los colectivos, a los funcionarios y eso se hace poniendo en marcha los mecanismos pertinentes de participación ciudadana”, ha señalado.
En lo relativo a la situación financiera, Rojo ha recordado que la capital está sin presupuestos para 2019 y apenas quedan seis meses para terminar el año, por lo que “hay que ver la realidad para ver cómo se puede gobernar los próximos seis meses y ver si hay que tomar decisiones”, mientras, en paralelo, trabajará también para que el presupuesto del año 2020 esté en vigor a principios del año.
“En estas primeras semanas y meses hay que programar cómo se van a llevar a cabo las políticas que queremos llevar a cabo”, ha indicado Rojo.
También ha hecho un llamamiento a la tranquilidad y a la calma porque “las cosas no se hacen de un día para otro, que los vecinos estén tranquilos y los asuntos del día a día se van a llevar a cabo pero las cosas que quedamos en proyectar, en cambiar, innovar o modificar hay que analizarlas, y con calma hacerlas, porque no se cambian de un día para otro”, afirma.
El nuevo regidor explica, en relación a que la Junta, la Diputación y el Ayuntamiento están gobernados por el mismo partido, que siempre ha creído que un alcalde "tiene que intentar siempre coordinarse y tener cordialidad con las administraciones públicas para beneficio de los vecinos, pero no todos piensan así”, y añade que si hubiese sido otro el resultado, su obligación era entenderse con todas las instituciones públicas gobernase quien las gobernase”.
