Castilla-La Mancha contabilizó durante 2017 un total de 137.428 empresas activas, durante todo el año o parte de él, lo que supuso un ritmo de crecimiento de las empresas del 0,4 por ciento.
Según los datos del Indicador de Demografía Empresarial publicado este miércoles por el INE, en 2017 en Castilla-La Mancha nacieron 11.682 empresas y otras 11.191 desaparecieron, lo que supone una variación neta de 491 empresas, y un ritmo de crecimiento del 0,4 por ciento.
A nivel nacional, el número de empresas que estuvieron activas en 2017, durante todo el año o parte de él, fue de 3,58 millones, lo que supuso un aumento del 0,5 % respecto al stock de compañías de 2016, aunque el ritmo de crecimiento se ralentizó.
Según este indicador, se muestra una desaceleración en el ritmo de crecimiento del número de empresas activas, ya que en 2016 el aumento fue del 2,3 % respecto al año anterior, y en 2017 este avance interanual representó cinco décimas.
Examinando el stock de empresas en los diez últimos años, la estadística muestra que el máximo se alcanzó en 2008 con 3,71 millones de empresas activas y que, desde ese año hasta 2013, el número de compañías fue disminuyendo.
A partir de 2014 el nivel de empresas que operaban en España comenzó a aumentar y en 2017 se situó en los niveles de 2010.
El número de creación de empresas en 2017 fue de 336.000 y superó en 51.386 al de desapariciones, que fue de 284.614, con lo que la tasa neta de crecimiento fue del 1,4 %.
El 58 % del stock de empresas que había hace dos años correspondió al sector Resto de Servicios, en el que se registraron 2,07 millones de compañías, seguido del Comercio, que representó el 28 % al alcanzar las 828.906 empresas y de la Construcción, que supuso el 12,7 %, con 455.101 firmas activas en 2017.
Las empresas activas ese año en el sector de la Industria fueron 220.087.
El INE destaca que tanto en el sector industrial como en el del Comercio se produjeron más desapariciones de empresas que de nacimientos, con lo que la tasa neta supuso una caída del 0,1 % y del 0,5 %, respectivamente.
No obstante, el número total de creación de empresas en 2017 superó al de las desapariciones durante cuatro años consecutivos, desde 2014.
Las actividades económicas con mayor incremento neto en 2017 fueron las actividades postales y de correos, las del transporte marítimo y por vías navegables interiores y las relativas a creación, artísticas y espectáculos, frente al descenso en las de juegos de azar y apuestas, otras industrias extractivas y fabricación de muebles.
Las empresas con 10 o más asalariados sumaron en 2017 las 145.942 unidades, mientras que las de entre 5 a 9 asalariados fueron 193.949.
Fueron las empresas de autónomos o las microempresas las que representaron casi el 97 % del total, ya que aquellas que no tenían asalariados sumaron 2,03 millones en 2017 y las que tenían entre 1 y 4 asalariados alcanzaron 1,2 millones.
Atendiendo al territorio donde tenían su sede las empresas, Cataluña fue la comunidad autónoma con mayor empresas activas en 2017 (661.178), seguida de Madrid (577.483), Andalucía (555.168), Comunidad Valenciana (385.991) y Galicia (213.787).
La tasa neta de crecimiento (diferencia entre número de empresas creadas y disueltas) fue superior en Baleares (3,2 %), Canarias (2,6 %), Melilla (2,4 %) y Ceuta y Madrid (1,9 %).
En la Comunidad Foral de Navarra se produjo un descenso del 0,1 %, mientras que las tasas netas de crecimiento más bajas fueron en Castilla y León (0,2 %), La Rioja (0,3 %), Aragón, Asturias y Castilla-La Mancha (0,4 %, respectivamente) y Cantabria (0,5 %).
En Cataluña y la Comunidad Valenciana la tasa neta de crecimiento fue del 1,6 % en 2017.
