Ha sido el jefe de policía de Negri Sembila, Mohammad Mat, quien reveló los datos de la autopsia, según recoge The Guardian: “Nora había muerto dos o tres días antes de ser encontrada, por una hemorragia en el intestino, que fue causada probablemente por hambre y estrés prolongado”
A pesar de que aún se está investigando lo sucedido, por el momento no han encontrado signos de violencia o un posible secuestro, pero están abiertos a cualquier hipótesis.
Nora era una joven con necesidades especiales ya que tenía una discapacidad de desarrollo y aprendizaje que la hacía más vulnerable, según habían informado sus padres.
La familia llegó a Malasia de vacaciones, donde se instalaron en un hotel cercano a la reserva natural de Negri Sembila, a unos 60 kilómetros al sur de Kuala Lumpur. El domingo 4 de agosto, los progenitores de la niña comprobaron que no se encontraba en su habitación y la ventana estaba abierta.
Inmediatamente después de dar la alarma, numerosos efectivos policiales se pusieron a trabajar en el rastreo de la menor, así como medios aéreos, perros y voluntarios.
No fue hasta una semana después que la policía halló el cadáver de la menor“junto a un arroyo en un área de plantación bastante montañosa. No estaba vestida”, aseguró el subdirector de la policía de Malasia, Mazlan Mansor.