La Diputación Provincial de Cuenca ha encargado al Instituto Geominero de España (IGME) un estudio científico de las aguas del Lagunillo de Las Tortugas de Cañada del Hoyo (Cuenca), que hace unas semanas cambió de color y adquirió una tonalidad rosa, lo que dado popularidad al entorno.
Este cambio en el color de las aguas ha despertado entre conquenses y visitantes una gran expectación, así como repercusión mediática, según ha recordado la institución provincial, que ha informado en una nota de la petición de ese estudio.
La Diputación ha señalado que ha sido el propio presidente de la institución provincial, Benjamín Prieto, quien recientemente se ha desplazado hasta la sede del IGME en Madrid para entregar de varias muestras de agua de este lagunillo, que forma parte del Monumento Natural de las Lagunas de Cañada del Hoyo.
El objetivo es contar con "información veraz" que contribuya a conocer con exactitud este fenómeno y completar la visita turística a esta pequeña laguna con información científica en torno al cambio de color de sus aguas.
Prieto ha confiado en que este fenómeno sea un revulsivo más para que los turistas se interesen por esta zona de la provincia de Cuenca con gran valor geológico.
En este sentido, ha recordado que la institución provincial elaboró una ruta por las Lagunas de Cañada del Hoyo y las Torcas de Los Palancares, construyó un centro de interpretación en
Cañada del Hoyo dentro de la Ruta de los Dinosaurios y puso en marcha una residencia para artistas en la antigua estación de tren de Cañada.
"Este estudio científico, por lo tanto, es un paso más dentro de la firme apuesta de la Diputación por poner en valor los recursos de la provincia como destino de turismo de interior y con el fin de propiciar su desarrollo económico para afianzar la población en el territorio", ha concluido Prieto.
