El sindicato CSIF ha rechazado las ratios que ha presentado la Consejería de Educación para el curso próximo y ha exigido una bajada "efectiva" para paliar las carencias educativas originadas por la pandemia, con un máximo de 23 alumnos por clase en Infantil y Primaria, 28 en Secundaria y 32 en Bachillerato.
En un comunicado, ha explicado que la Junta plantea 25 alumnos por clase en Infantil y Primaria; 30 en Educación Secundaria y 35 en Bachillerato, unas ratios que, además, pueden elevarse en aplicación del 10 por ciento de escolarización sobrevenida.
CSIF ha señalado que "siempre" ha reclamado una bajada significativa del número de alumnos para mejorar la calidad de la enseñanza, pero en la situación actual "esta reducción se torna absolutamente ineludible".
Por otra parte, sobre la implantación de purificadores con filtros homologados en las aulas, el CSIF ha explicado que la Consejería de Educación, que ha dado el visto bueno a su uso, debe asumir el coste de su instalación y mantenimiento.
De lo contrario, el CSIF considera que puede haber discriminación de centros en Castilla-La Mancha, ya que en este momento el coste y mantenimiento de los purificadores lo están asumiendo las administraciones locales y asociaciones de padres y madres, y hay centros con ayuntamientos y organizaciones que no pueden costear estos aparatos.
Para asegurar la igualdad de condiciones en toda la red de educación pública de la región", ha señalado el sindicato.
