Los ediles Carmen Aceituno y Juan Pedro Ayuso, que han abandonado el Grupo Municipal de Ganemos en Talavera, pero que mantendrán su representación en el Ayuntamiento de la ciudad como no adscritos, han asegurado que han tomado la decisión por razones políticas, no personales.
Aceituno ha explicado en rueda de prensa que su renuncia a pertenecer al grupo se debe a "incumplimientos reiterados" por parte del concejal Miguel Ángel Sánchez, tanto del código ético de Ganemos como de su programa, así como de acuerdos plenarios y de asambleas.
En este sentido, ha recordado que hace dos semanas solicitaron la revocación de Sánchez de su cargo, si bien la asamblea, celebrada el pasado día 7, decidió no votar y retiró ese punto del orden del día.
Por ello, tras unos días de reflexión conjunta, ambos han decidido continuar con sus actas y trabajar desde una nueva posición por el proyecto en el que creyeron desde el principio, pero sin la influencia de una parte de Izquierda Unida que, a su juicio, "ha hecho uso de la estructura de su partido para apoderarse de Ganemos Talavera".
La edil ha insistido en que los motivos de esta renuncia "son políticos, no personales" y ha afirmado que no hay "nada oculto" y que las acusaciones vertidas contra Lorenzo Castellote como urdidor de una supuesta trama contra Sánchez son "absolutamente falsas".
En opinión de ambos, es "la mejor opción" para garantizar que el proyecto que arrancó hace ahora dos años se mantenga, pues su intención es seguir trabajando con la filosofía con la que comenzó esta formación, basada en la participación y la toma de decisiones en asamblea.
Para ello, contarán con el apoyo de alrededor de una veintena de personas que ya se han desvinculado de Ganemos o han manifestado su intención de hacerlo, así como de todos aquellos que apoyen este movimiento al que habrá que dar forma de nuevo.
Ayuso ha añadido que el espacio de toma de decisiones de Ganemos Talavera ha sido "vulnerado" por lo que se ha mostrado partidario de abrirlo más, darle más transparencia y tratar de no cometer los mismos fallos que han llevado a la ruptura del partido.
A partir de ahora, ambos ediles tendrán voz y voto en los plenos, pero trabajarán de manera independiente.
Además, dispondrán de un espacio físico para realizar su labor en el Ayuntamiento, aunque aún no están definidas sus nuevas funciones.
En cualquier caso, han aseverado que se van "en peores condiciones" de las que tenían porque "tenemos todos los derechos políticos, pero no económicos".
Sin embargo, han considerado que es un ejercicio de responsabilidad seguir como concejales y cumplir con el compromiso que adquirieron en su día al aceptar el cargo.
