La Diputación de Ciudad Real ha rendido un emotivo homenaje a los 198 diputados que a lo largo del periodo democrático han formado parte de las distintas corporaciones provinciales que ha tenido la Institución provincial.
El patio del Palacio Provincial, que este año celebra el 125 aniversario de la recepción de sus obras, se ha llenado para celebrar este homenaje que la Institución ha hecho coincidir con la conmemoración del 40 aniversario de la Constitución.
El acto, presidido por su máximo rector, José Manuel Caballero, ha contado con la presencia del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, y numerosas personalidades públicas, entre ellos varios consejeros del Gobierno regional, la alcaldesa de Ciudad Real, Pilar Zamora, y diputados nacionales y senadores.
El acto, cargado de simbolismo, ha reconocido a los expresidentes ya fallecidos, Eloy Sancho, de UCD, y Jesús Garrido, del PP, y a los socialistas Francisco Ureña, Nemesio de Lara y Francisco Javier Martín del Burgo.
Junto a ellos, cada diputado o, en el caso de los ya fallecidos, un familiar han recibido una réplica personalizada de la fachada del Palacio provincial y un facsímil del documento original de la escritura del solar sobre el que se edificó este edificio decimonónico.
La alcaldesa de Ciudad Real, Pilar Zamora, en nombre de los regidores de la capital, ha reconocido el trabajo de los diputados provinciales a lo largo de más de un siglo de servicio a los vecinos de la provincia.
Por su parte, el presidente de la Diputación provincial, en un emotivo discurso, ha tenido un recuerdo especial para los presidentes fallecidos, de los que ha destacado su compromiso y trabajo por la Institución, y ha valorado el trabajo que han realizado también todos los diputados provinciales.
Ha reconocido que la Institución no ha sido ajena a los cambios de los tiempos, y "se ha ido configurando como muy presente", y ha abogado por la vigencia y mantenimiento de las diputaciones frente a los que proponen su desaparición porque "son de utilidad para los municipios y, en especial, para las zonas rurales".
Además, ha incidido en su pleno reconocimiento constitucional y que han ejercido siempre un ejemplar trabajo de lucha contra la desigualdad y la pobreza, "y todo ello", dirigiéndose a los diputados, "ha sido posible con el concurso de todos ustedes, ya sea en el Gobierno o en la oposición".
Caballero ha destacado, asimismo, el empeño y tesón que las corporaciones municipales han demostrado en el ejercicio de sus responsabilidades y ha concluido que el haber sido una Administración alejada de la corrupción, con una gestión limpia y transparente, la ha llevado a ganar "un gran caudal de confianza" entre la sociedad y a ser reconocida por alcaldes y concejales.
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha señalado que este homenaje es un acto de "buena memoria y de justicia" que permite mantener en la memoria a todos los que han trabajado en la política y por los ciudadanos.
Según García-Page, el homenaje debe entenderse como un "reconocimiento de la labor municipal" y, en especial, "a la casa madre", como es la Institución, y al igual que Caballero no ha dudado en defender la vigencia de las diputaciones frente a quienes las han cuestionado.
Ha justificado que no deben ser consideradas nunca como culpables de la crisis económica y que lo que se dijo en ese sentido "fue mentira y hoy también lo es" y ha concluido que las diputaciones provinciales han ayudado a consolidar "la base de la Democracia a través de su utilidad".
