El Gobierno de Castilla-La Mancha ha apostado este miércoles por asegurar la transición a una economía baja en carbono, diversificada y favorable al emprendimiento y por un impulso especial al hidrógeno.
Así lo ha expresado el director general de Industria, Energía y Minería, José Luis Cabezas, durante su intervención en la reunión de la Plataforma de las regiones en transición con el carbón que se ha celebrado en el Ministerio para la Transición Ecológica, ha informado la consejería de Economía, Empresas y Empleo en nota de prensa.
Cabezas ha explicado que los grandes retos para estas regiones, además de una transición a una economía baja en carbono, son revitalizar el comercio como atractivo local, apoyar la creación de empresas y la innovación en las existentes, así como aumentar la actividad del escenario urbano.
Asimismo, ha hecho hincapié en que Puertollano (Ciudad Real), único municipio afectado por la minería en la región, necesita ayuda de Europa y del propio Ministerio para llevar a cabo proyectos de producción de energía eléctrica con tecnología fotovoltaica y proyectos de rehabilitación ambiental.
Además, para hacer de la localidad un polo de conocimiento y desarrollo tecnológico en energías renovables y tecnologías medioambientales.
Junto a representantes de las comunidades autónomas de Aragón, Asturias y Castilla y León, el responsable castellanomanchego ha planteado una estrategia de movilidad sostenible con impulso especial al hidrógeno por encontrarse en Puertollano el Centro Nacional del Hidrógeno y aumentar, al mismo tiempo, las ayudas a la implantación de empresas.
