Los accidentes leves de tráfico o golpes de chapa en los que no hubo heridos crecieron en Castilla-La Mancha un 1,83 por ciento en 2019, hasta llegar a la cifra de 72.262 siniestros, que la sitúan como la tercera comunidad autónoma con mayor incremento.
Así se desprende en un estudio que ha hecho público este martes la Unión Española de Entidades Aseguradoras y Reaseguradoras (Unespa), que ha elaborado un informe en el que analiza la evolución de los accidentes entre los meses de enero y noviembre de 2018 y el mismo periodo del pasado año.
Según el informe de la patronal del seguro, en todo el país se produjeron 1,94 millones de accidentes leves de tráfico, lo que representa un incremento interanual del 0,33 por ciento y la mayor cifra de siniestros de circulación sin heridos desde 2010.
Unespa ha explicado que los accidentes de tráfico leves son típicos del tráfico urbano y constituyen "una magnitud que refleja la situación económica de un país".
Así, según la patronal del seguro, en momentos de bonanza se producen más colisiones porque hay una mayor cantidad de vehículos circulando por las calles, mientras que en años de crisis ocurre lo contrario, es decir, baja la siniestralidad.
Los golpes de chapa tocaron suelo en España en 2013, con 1,73 millones de percances, y desde entonces no han dejado de crecer.
Por comunidades autónomas, los mayores incrementos se registraron en Murcia, un 3,48 por ciento; Andalucía, un 2,50 por ciento, y Castilla-La Mancha, un 1,83 por ciento, mientras que los mayores descensos correspondieron a Aragón, un 2,09 por ciento, País Vasco, un 2,07 por ciento, y Baleares, un 1,82 por ciento.
En el caso de las provincias, el informe muestra cómo los accidentes leves descendieron en 22 de ellas, subieron en las otras 23 y se mantuvieron prácticamente planos en cinco (Asturias, Huesca, León, Madrid y Soria).
Destacan las subidas de Albacete y Málaga, así como las bajadas de Segovia y Palencia.
En Albacete, los accidentes leves se incrementaron un 3,75 por ciento entre enero y noviembre de 2019 con respecto al mismo periodo del año anterior, hasta llegar a 13.341.
También crecieron un 2,99 por ciento en Cuenca (7.651), un 1,88 por ciento en Toledo (24.972) y un 1,70 por ciento en Ciudad Real (17.554).
En cambio, Guadalajara fue la única provincia castellano-manchega en la que hubo una disminución, con 8.764 accidentes, un 1,77 menos que los registrados entre enero y noviembre de 2018.
