Según recoge el HuffPost, David García, el jefe de comunicación del hospital Gregorio Marañón de Madrid, ha compartido en su perfil de Twitter la carta al director que Javier Vega, un ciudadano de Cáceres, ha remitido al diario ABC.
En el texto se resume perfectamente cómo la actitud irresponsable de una persona sospechosa de coronavirus es capaz de comprometer la salud de todo un pueblo, en este caso Talaveruela de la Vera (Cáceres).
“Y cómo (la actitud irresponsable) puede poner en jaque a varios pueblos y personas vulnerables que se mantenían a salvo de la covid-19 con mucho esfuerzo y soledad al pasar mucho tiempo aislado en pueblos pequeños”, ha sentenciado García.
La carta cuenta la historia de una persona a la que llama Ramón. Este se tuvo que hacer la prueba PCR al haber estado con una amiga que había dado positivo por coronavirus.
Esta carta en @abc_es describe perfectamente lo que puede suponer una persona irresponsable y cómo puede poner en jaque a varios pueblos y personas vulnerables que se mantenían a salvo del #COVID19 con mucho esfuerzo y soledad al pasar mucho tiempo aislado en pueblos pequeños pic.twitter.com/fmxFcPVDuy
— David García García (@OjodeThot) August 18, 2020
“Como el resultado tarda varios días y se aburre en su ciudad, decide irse a su pueblo de Cáceres a 200 kilómetros de su casa mientras le comunican el resultado”, describe.
En el municipio no hizo cuarentena. Se fue a bañar con sus amigos, a los bares, a hacer botellón, a dar paseos con ambiente festivo en el coche o a otros pueblos de la zona. “Pero lo que no le gusta es ponerse la mascarilla ni guardar el distanciamiento social”, añade.
Después de acudir a una misa con sus padres en la que había mucha gente mayor, cuenta que Ramón recibió una llamada en la que le confirmaban que era positivo por coronavirus.
“Entonces ahora se encierra en casa dejando atrás un reguero de incertidumbre y miedo. ¿Os parece surrealista? Pues eso ha pasado en Taraveruela”, remata.