‘El Trilero’ y 'Ken', patrullando las noches: de la juerga a la cárcel acusados de violación

La juez los ha enviado a prisión después de que una joven madrileña de 18 años les acusara de haberla violado y consumido cocaína sobre su cuerpo

‘El Trilero’ y 'Ken', patrullando las noches: de la juerga a la cárcel acusados de violación - EL ESPAÑOL
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Según informa Andros Lozano en EL ESPAÑOL, cuando el policía V. P. G., al que en su pueblo apodan el Trilero y el delincuente, consiguió que le autorizasen a realizar una comisión de servicio en Estepona (Málaga), el agente se sintió liberado. Se iba quitar de en medio durante un tiempo y evitaba volver a encontrarse cada día con sus compañeros del cuerpo, los mismos con los que había tenido continuos roces. Y más desde que su hermano, antiguo subinspector, había dado el salto a la política en las últimas elecciones al acceder al cargo de teniente de alcalde en un gobierno que les negaba un aumento salarial.

De la autorización para mudarse a Estepona hace más o menos medio año. El Trilero, hijo de guardia civil y nacido en Galdácano (Vizcaya), dejó la vida anodina de Puertollano y se instaló en la sugerente Costa del Sol. Allí, pronto se hizo amigo de otro policía poco querido entre sus compañeros, J.C.G. Como él, también tenía mote. Ken. Y, como él, era conflictivo. Pronto surgió la amistad entre ambos. Cuentan desde el entorno de ambos que en los últimos meses Ken le tenía alquilada su casa a el trilero ya que él se había instalado a las afueras de Estepona.

El sábado pasado, a ambos les tocó realizar juntos un servicio especial por las calles de Estepona. 24 horas patrullando la ciudad codo con codo. Al día siguiente, a las seis de la mañana y terminada la larga jornada laboral, fueron a la casa de tres chicos madrileños que estaban en la población costasoleña disfrutando de unos días de descanso tras acabar los exámenes de Selectividad.Eran dos chicas y un chico -novio de una de ellas-.

Poco antes, sobre las 05.20 horas, a la salida de una discoteca los pararon cuando iban en coche, les preguntaron si habían bebido y les recomendaron volver a casa en taxi. Al varón, el único con carnet, no le practicaron la prueba de alcoholemia ni le multaron. Los agentes se comprometieron a mandarles la ubicación del vehículo a su móvil para que lo recogieran horas después.

Pero la complicidad surgida entre el trilero y Ken les habría llevado a ir a la casa de los jóvenes sobre las 06.30 horas, quitarles las llaves y, presuntamente, violar dentro a la joven que estaba soltera, de 18 años. Según denunció la chica, también habrían consumido cocaína sobre su cuerpo. Mientras lo hacían, su amiga sufrió un ataque de ansiedad y salió de la vivienda de la víctima, cuyo padre es el dueño del inmueble.

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