Según recoge Informativos Telecinco, una mujer de 70 años ha muerto en un hospital de Caserta, en Italia, después de que se negara a recibir una transfusión de sangre que la hubiera salvado. Los médicos no pudieron hacer nada ante la decisión de la fallecida, testigo de Jehová, y de sus hijos que la apoyaron.
La mujer ha llegado al hospital con una hemorragia gastrointestinal y varios días después ha muerto desangrada, según ha publicado La Repubblica. El especialista que la ha atendido, Gianfausto Iarrobino, ha expresado su tristeza y disgusto por un fallecimiento que podía haber sido evitado.