Según recoge El Caso, nueva agresión sexual por sumisión química a Igualada (Barcelona), que llega dos semanas más tarde de la sufrida a Terrassa (Barcelona) el pasado sábado 13 de mayo. Una chica de 33 años ha presentado delante de los Mossos d'Esquadra una denuncia por haber sufrido, presuntamente, una violación tras ser drogada con una bebida alcohólica en la cual le introdujeron las sustancias. Los hechos, según consta a la denuncia citada por la ACN, tuvieron lugar este viernes en la ciudad. La joven estaba de fiesta con una amiga e hicieron los tradicionales correbars, por diferentes establecimientos, hasta que llegaron a una discoteca en el barrio del Rec. Allí conoció a un chico y fue a tomar una cerveza a su casa.
Lo que parecía un encuentro inocente para continuar la fiesta con alguien que había conocido en la discoteca, acabó completamente al revés. El chico le ofreció la cerveza y, según explica en la denuncia, la chica en un momento determinado ya no recuerda nada más de la noche hasta que despertó el día siguiente en la cama del joven. Al levantarse, se percató que tenía la ropa interior bajada y, además, notó molestias en la zona de los genitales. Ante esta situación, se marchó corriendo del piso.
Denuncia que le puso alguna cosa en la cerveza y la llevó del sofá en la cama
La amiga de la presunta víctima, sin embargo, se marchó de la sala de fiestas y se quedó con la conocida y el chico. Hacia las seis de la madrugada de este viernes, los tres se fueron a pie del local de ocio nocturno y el denunciado las invitó a subir a casa a tomar alguna cosa. Una vez allí, la amiga se fue al recibir una llamada y se marchó, por lo que se quedó a solas con el chico. Este le ofreció la cerveza que, supuestamente, tendría algún tipo de sustancia estupefaciente que le habría hecho desvanecerse y "ya no recordar nada más".
Según el relato de los hechos recogido a la denuncia, se despertó a las once de la mañana en una cama y no en el sofá donde habían estado tomando la cerveza. Ha recordado que se asustó mucho porque no entendía qué hacía allí y notó "muchas molestias" en la zona de los genitales. La joven se vistió y se marchó corriendo del domicilio. Una vez afuera, llamó a la conocida con quien la noche anterior habían ido juntas al piso del presunto agresor, pero esta se desentendió de los hechos. Por todo esto, la chica de 33 años ha denunciado al chico por una supuesta violación por sumisión química este viernes en un piso de Igualada.
