Según recoge El Caso, una mujer de Charleston (Estados Unidos) mata a tiros a un hombre y evita que una fiesta de cumpleaños se convierta en la siguiente gran tragedia de los Estados Unidos. Los hechos han ocurrido esta semana, cuando un hombre se dirigió armado con un rifle semiautomático a la casa donde una cuarentena de personas celebraba un aniversario dispuesto a abrir fuego contra ellas. La mujer no dudó un segundo y utilizó su propia arma para abatir al atacante.
El pasado 25 de mayo, una cuarentena de personas se encontraba en una casa de una tranquila zona de apartamentos residenciales de la ciudad de Charleston celebrando una fiesta doble: un cumpleaños y una graduación. La velada no podía ir mejor hasta que, en un momento, un grupo de asistentes llamaron la atención a un hombre que circulaba a una elevada velocidad por las calles del barrio, poniendo en peligro a los niños que estaban fuera jugando. Después de una disputa que duró unos instantes, el hombre se marchó y todo volvió a la tranquilidad. Para sorpresa de todo el mundo, sin embargo, el individuo volvió al cabo de un rato armado con un rifle semiautomático y empezó a disparar contra la casa.
El atacante era un conocido delincuente
En medio de la lluvia de balas, que afortunadamente no hirió a nadie, una de las asistentes a la celebración no dudó ni un segundo a defenderse y defender a sus amigos. La mujer cogió su arma y abrió fuego contra el atacante, disparándole varios tiros hasta que, finalmente, lo consiguió abatir. Las fuerzas de seguridad del estado de West Virginia se personaron en el lugar de los hechos al cabo de poco rato y tomaron declaración a los asistentes con el fin de aclarar los hechos. La investigación ha revelado que el atacante era un conocido delincuente de la zona; el individuo, de 37 años, acumulaba varios incidentes por robos, peleas y lesiones con armas de fuego y, a causa de sus antecedentes penales, legalmente tenía prohibido poseer un arma como la que utilizó para asaltar la fiesta.
La policía aplaude la actuación de la mujer
La policía del estado de West Virginia no ha revelado la identidad de la mujer, pero en declaraciones a los medios locales, han alabado su actuación. El jefe de la policía, Tony Hazelett, ha declarado: "Ella es una miembro de la comunidad que llevaba su arma de forma legal. En lugar de huir de la amenaza, se comprometió a hacerle frente y salvó numerosas vidas". No obstante, el hombre no ha respondido a los periodistas que reclamaban información sobre como había conseguido las armas el delincuente, ya que la ley le prohibía tener. El policía en ninguno sostiene que no tiene claro cómo lo había podido obtener, pero que investigarían el asunto. También ha detallado que no presentarán cargos contra la mujer, quien, además, ha mostrado en todo momento una actitud colaborativa con los agentes y la investigación.
