Un adolescente de 13 años entre la vida y la muerte tras explotarle una granada

Los amigos del menor también han resultado heridos

Según recoge El Caso, jugar con explosivos, aunque sean tan antiguos que a simple vista parecen inofensivos, nunca es una buena idea. De hecho, un niño de 13 años ha acabado en el hospital con heridas de mucha gravedad después de manipular una granada antitanque de la Segunda Guerra Mundial mientras jugaba con dos amigos en el interior de un molino en ruinas a las afueras de la localidad francesa de Avenay, situado a unos 70 kilómetros de Normandía. El resultado de esta insensatez fue la explosión del artefacto en las manos del adolescente; sus amigos también sufrieron heridas, a pesar de que de carácter más leve.

El accidente tuvo lugar este domingo en torno a las cinco de la tarde. Fueron algunos de los vecinos quienes, alertados por la detonación, fueron a ver qué había pasado y se encontraron a los tres niños heridos. Hasta el lugar se trasladaron los servicios de emergencias, los gendarmes y la unidad de desactivación de minas. Las autoridades francesas cerraron todo el perímetro mientras los menores eran trasladados al Hospital Universitario de Caen en una ambulancia.

Las autoridades de la región de Calvados, donde se sitúa el municipio donde ha pasado el accidente, han emitido un comunicado en su perfil de X alertando sobre la peligrosidad de los explosivos. "Las municiones de la Segunda Guerra Mundial siguen presentando hoy día un peligro real. Si descubres munición, informa inmediatamente a la policía", han escrito.