Según recoge Informativos Telecinco, un insólito incidente ha conmocionado a los ciudadanos de Portoviejo, en Ecuador, donde se llevó a cabo la tétrica despedida de un joven de 21 años. Sus amigos sacaron el cadáver del ataúd y lo subieron en una moto para pasearlo por la calle a vista de los decenas de transeúntes.
Según los amigos y familiares de Erick Cedeño Méndez, asesinado el domingo pasado mientras se dirigía al funeral de un amigo, el paseo en moto era un último homenaje para el difunto, informó la cadena Ecuavisa. Los allegados del fallecido también rociaron bebidas alcohólicas sobre el féretro. Pero el adiós fue más allá y optaron por sacar el cuerpo del ataúd para montarlo en la motocicleta como parte de un ‘último viaje’.
En las grabaciones se puede evidenciar como, entre empujones, varios hombres colocaron el ataúd en el piso y sacaron el cuerpo. El difunto iba vestido con un pantalón negro y camisa blanca. Dale, dale”, se escucha que un hombre dice al motociclista para que arranque y dé la vuelta por el lugar.
#Portoviejo
— Steeven Macías (@steevenmaciastv) November 30, 2021
Jovenzuelos profanando un cadáver al sacarlo de su féretro y llevarlo a pasear en moto, como "ritual del horror".
Algo está descalibrado en esas cabezas.
"Si no respetan a un muerto, que esperar del respeto a los vivos", decían quienes vieron el grotezco espectáculo. pic.twitter.com/Q9HfYk019Y
Tenía antecedentes por tráfico de drogas
La llamativa situación no pasó desapercibida en la comunidad, que vio cómo la ceremonia fúnebre se tornaba algo siniestra al manipular el cadáver sin vida de esa forma. Hacía un mes que Cedeño había salido de prisión y tenía antecedentes por tráfico de drogas, detalló el medio ecuatoriano.
Ninguna de las personas que sacaron el cadáver del cajón fue detenida por las autoridades Según ellos, tenían autorización de los familiares. Uno de los agentes sostuvo que “es la primera vez que sucede esto”, en la ciudad y lo calificó como “un acto aberrante e insalubre”. Todavía no se ha comenzado una investigación del caso, debido a que el funeral es considerado como un acto privado y no ha existido denuncias.
