Según recoge El Caso, María era una mujer que fue asesinada en La Granada (Barcelona) y su cadáver fue encontrado en un contenedor del municipio. Han salido a la luz las surrealistas declaraciones del presunto autor de los hechos para justificar el crimen: asegura que la confundió con un perro muerto y que, por este mismo motivo, tiró sus restos a la basura, una versión que, evidentemente, no ha convencido al juez, que lo ha enviado a la prisión de manera provisional.
María Carmen Ortiz Molina, de 60 años, desapareció hace meses en extrañas circunstancias en Sant Sadurní d'Anoia. Los Mossos d'Esquadra abrieron una investigación para localizarla cuanto antes mejor. Estas investigaciones apuntaban a su hermano como presunto autor de la desaparición, pero no tenían pruebas suficientes para incriminarlo.
Tira los restos de su hermana en un contenedor de la Granada
Por este mismo motivo, a pesar de la falta de pruebas, los agentes no le sacaron el ojo de encima y, finalmente, sus hipótesis se acabaron cumpliendo y lo detuvieron como presunto autor de los hechos, ya que el hombre confesó que había tirado sus restos en un contenedor de La Granada. Así y todo, remarcaba en todo momento que él no era el responsable de su muerte.
Para justificar los hechos, explicó que confundió los restos de María del Carmen con las de su propio perro. El cadáver estaba debajo de la cama y asegura que estaba convencido de que era el de su mascota y que se deshizo descuartizándolo y tirándolo en el contenedor.
Asegura que la confundió con su mascota muerta
Con esta surrealista excusa, explicó a los policías que había tirado el cuerpo a la basura, que él pensaba que eran de su perro, pero que podrían ser de su hermana también. Cuando los mossos vieron el cadáver, pudieron comprobar que eran restos humanos, que se encontraban en avanzado estado de descomposición y que tenía signos de haber sufrido una muerte violenta.
El hermano de la víctima ingresa en la prisión de manera provisional
La inverosímil excusa de la confusión del cadáver del perro con el de María del Carmen, evidentemente, no convenció al juez y, por este mismo motivo, cuando el sospechoso pasó a disposición judicial, se decretó su entrada en la prisión de manera provisional como presunto autor de la muerte de María Carmen Ortiz Molina.
