Según recoge Informativos Telecinco, una joven de 22 años intenta matar a su prometido, de 28 años en la India, para tratar de evitar casarse con él. El matrimonio entre ambos había sido acordado por las dos familias sin que, al parecer, la pareja estuviera de acuerdo. Al menos la novia. Por eso, a poco más de un mes de la boda, esta decidió hacer algo para evitar tener que pasar el resto de su vida con su futuro marido.
Tras una comida familiar, la joven llevó a su prometido a un templo en Andhra Pradesh, India. Allí, encima de una colina, aislados, ella le aseguró que tenía una "sorpresa" para él. Para dársela tendría que vendarle lo ojos.
Lo que en un principio parecía una escena romántica de dos jóvenes comprometidos, pronto se convirtió en algo dantesco. La joven, aprovechando que el novio no veía, decidió cortarle el cuello. La intención, parece ser, era acabar con su vida y así con su matrimonio de conveniencia.
La víctima recibió 30 puntos en el hospital
El hombre consiguió sobrevivir al ataque, después de que los vecinos de Andhra Pradesh lo trasladasen de urgencia al hospital, donde recibió 30 puntos de sutura. Mientras él se recupera, la joven está acusada de asesinato. De ser declarada culpable podría enfrentarse a una pena de diez años de cárcel.
Ambas familias se culpan mutuamente de lo ocurrido. Los padres de la novia aseguran que esta es inocente, mientras que los del novio claman justicia. Lo que está claro es que el compromiso se ha roto.
