Según recoge Informativos Telecinco, el hallazgo de los cuerpos sin vida de dos mujeres jóvenes en el municipio de Turén, Venezuela, ha conmocionado al país. Las dos jóvenes habían desaparecido, en la misma zona, con una diferencia de 24 horas. Los cuerpos de ambas, que han aparecido en la misma localidad, presentaban signos de abuso sexual y estrangulamiento.
Eduarlis Carolina Falcón Torrealba, de 20 años, y Eliannys Andreína Martínez Roñoz, de 17, desaparecieron con apenas 24 horas de diferencia, pero sus cuerpos han sido encontrados en el mismo caserío del municipio de Turén, conocido como La Misión. Las autoridades de esta región centro-occidental del país, trabajan con la posibilidad de que ambos crímenes hayan sido cometidos por una misma persona, y es que ambos cadáveres mostraban los mismos signos de abuso sexual y estrangulamiento.
#AHORA MINISTERIO PÚBLICO #DESIGNA dos Fiscales Nacionales para investigar y #SANCIONAR el repudiable crimen (Turen/Portuguesa) de las jóvenes Eduarlis Carolina y Elyannis Martinez: ambas fueron halladas con signos de tortura física en un terreno baldío... Habrá #MaximaJusticia pic.twitter.com/VV27VqL755
— Tarek William Saab (@TarekWiliamSaab) February 24, 2021
El primer cadáver encontrado por la policía fue el de Elyannis Martínez, el pasado lunes, quien había desaparecido el domingo después de asistir a un culto evangélico. Su cuerpo se encontró en un descampado en el caserío de La Misión, con signos de maltrato y abuso sexual. El segundo cuerpo, el de Eduarlis Falcón, apareció el pasado martes, junto a un puente sobre el río en el mismo Caserío, con signos similares de abuso sexual, mutilada y posiblemente estrangulada. La joven había salido en bicicleta del caserío La Misión por la mañana del lunes y la familia no había vuelto a verla y denunció su desaparición.
Junto a ambos cadáveres se encontró un bejuco, un fragmento de una planta muy flexible y resistente que se utiliza pare la fabricación de cestos, probablemente el arma utilizada para estrangular a ambas víctimas. El mismo modus operandi, el mismo arma para acabar con sus víctimas, la edad similar de las víctimas, el rapto previo y el abuso sexual conectan ambos casos y apuntan a un mismo autor, según apuntan desde el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Criminalísticas y Penales (CICPC) del estado Portuguesa.
