El cuerpo sin vida del taxista Luis Ramón Pérez, conocido como Luisito, fue hallado el pasado jueves en Berroa, a las afueras de La Habana, con signos de violencia y de haber sido quemado, han explicado sus compañeros de trabajo.
Según la prensa independiente dos jóvenes, de 21 y 22 años, fueron detenidos por su presunta vinculación al crimen, que tenía como objetivo robar el vehículo que usaba Pérez como taxi.
El chofer de Panataxi, una empresa estatal ubicada en la Avenida Independencia (Boyeros) y Talleres, en la capital cubana, desapareció el jueves mientras hacía una carrera. Su compañero de trabajo, quien usa el taxi en las horas en que Pérez estaba fuera, fue quien denunció la desaparición a la policía, de acuerdo a los medios.
Según dijeron los compañeros de Pérez, el auto fue localizado y el asesinato se encuentra en investigación. Los directivos de la Agencia de Taxis han exigido a sus empleados no hacer ninguna declaración a la prensa.
“Aquí el que no sale con un bate, sale con un tubo, y hay choferes que hasta llevan un machete debajo del asiento porque los asaltos para quitarles el dinero o robarles alguna pieza del auto están a la orden del día”, dijo una trabajadora de la empresa en la que trabajaba Pérez a 14ymedio.
El gremio de taxistas está consternado por el suceso. “La gente cree que como están manejando carros modernos tienen mucho dinero, pero no es así”, agregó la mujer.
El Nuevo Herald intentó obtener una versión de la policía cubana sin éxito. Los medios oficiales no han reportado sobre el asesinato.
