Todo el mundo ha acudido a algún baño que no sea el de su casa. En situacione delicadas, cuando no nos fiamos de las bacterias que puede tener un váter, cubrimos el asiento con papel higiénico pensando que estaremos más seguros ante posibles infecciones, pero todo lo contrario, el inodoro es el lugar más seguro siempre que esté limpio y seco, según recoge 20Minutos.
El váter es el lugar más seguro, en cuanto a bacterias se refiere, según recoge 22words en un reportaje. Los inodoros están diseñados para repeler microorganismos gracias a su diseño curvado y a su superficie suave. Hay más bacterias en el papel que en el propio asiento de la taza. Es ahí donde se encuentran las bacterias propias de las deposiciones, en el papel higiénico.
No existe ninguna evidencia de que cubrir el asiento del váter proteja de los gérmenes, aseguró a la revista Time el doctor William Schaffner, de la Vanderbilt University. La superficie porosa del papel es especialmente proclive a almacenar bacterias, según Philip Tierno, profesor de Microbiología en la Facultad de Medicina de la Universidad de Nueva York.
La piel es una barrera bastante fina contra las bacterias. El verdadero peligro está en no lavarse las manos tras ir al baño y luego tocarse las mucosas. Si aún así eres reacio a sentarte en un baño público, tal y como apunta Insider, puedes hacer tus necesidades en cuclillas.
