Es una época triste para los mitos de la infancia. Surgen teorías que cambian por completo el sentido de las películas, espectadores avisados descubren mensajes ocultos en los dibujos que marcaron a generaciones y ahora, también, destruyen lo que todo el mundo pensaba sobre las chucherías.
¿O es que tú no has creído siempre que estas gominolas eran gajos de mandarina? Pues NO.
¿Cómo se pronuncia “croissant”? 🤔 pic.twitter.com/mtYoXoBKsH
— Fini Golosinas (@Fini_golosinas) 4 de diciembre de 2017
El mensaje de la marca que fabrica esas chucherías ha generado, además de algunas bromas, una auténtica oleada de estupefacción:
Se cae España.
— Fini Golosinas (@Fini_golosinas) 4 de diciembre de 2017
Son gajos de naranja.
Pero parecen crusanes. Cruasants. Croissants. Curasanes.
Color naranja, sabor a naranja y forma de gajo de naranja... Y vosotros creyendo que hacíais croissants
— Eduardo Arranz (@EduArranzN) 5 de diciembre de 2017
Pues yo a esto siempre los he llamado "riñoncitos" 😐
— Fran de Astora (@FrankJoestar) 4 de diciembre de 2017
Color naranja, sabor a naranja y forma de gajo de naranja... Y vosotros creyendo que hacíais croissants
— Eduardo Arranz (@EduArranzN) 5 de diciembre de 2017
No puede ser... pero... y los gajos de mandarinas??? me habeis hecho el lio! 🤦🏼♂️😂
— BARTOLICO ✨ (@Soleriii_5) 5 de diciembre de 2017
@MonicaB_0312 pic.twitter.com/NOmrO28aNC
— vaiini (@natalia_zurdo) 4 de diciembre de 2017
Pero no eran gajos de naranja??
— merry crisis (@candelobra) 4 de diciembre de 2017
Pues yo siempre los he llamado gajo de naranja 🍊 ( porque pensaba que era eso 😂 ) pic.twitter.com/942dn6KZKd
— Cяiรтiиα ρiédяσlα (@Cristiinita98) 5 de diciembre de 2017
— Alejandro. (@alexdominguezv) 4 de diciembre de 2017