El porno "feroz" que alienta a Las Manadas: ¿es el cine X una escuela de violaciones?

EL ESPAÑOL habla con actrices de cine para adultos, directoras porno, psicólogas infantiles y médicos especialistas en la materia para saber qué papel que juega el porno en el aumento de brutales agresiones sexuales

El porno "feroz" que alienta a Las Manadas: ¿es el cine X una escuela de violaciones?
photo_camera El porno "feroz" que alienta a Las Manadas: ¿es el cine X una escuela de violaciones?

Según informa Marta Espartero en EL ESPAÑOL, “La escuela de ‘la Manada’ [...] es el porno feroz: ese porno sexista y violento que obviamente han consumido durante años estos y muchos otros hombres (también algunas mujeres, qué duda cabe). Películas o vídeos en los que se muestran violaciones o relaciones de brutal sometimiento y violencia, donde casi siempre el argumento de fondo es que ‘ella es una puta’ o que ‘disfruta siendo maltratada’”.

La psiquiatra infantil Ibone Olza no tiene ninguna duda: el germen de las brutales agresiones sexuales que se están viviendo en España se encuentra en la pantalla. Concretamente, en la del ordenador. En internet es sencillo encontrar pornografía gratuita, incluso cuando no es el motivo de la búsqueda. Barra libre de relaciones sexuales a un solo clic.

Un grupo de hombres queda con una mujer. Primero la fuerzan a beber. Después, comienzan, delicadamente, a desnudarla. Ella pone cara de pánico. De que no quiere. Pero ellos la agarran, la cogen y la violan. En grupo. Uno detrás de otro o simultáneamente. Y ella grita. Pero no paran. 

No es la descripción de una denuncia por agresión sexual. Es el argumento de unas cuantas películas X que circulan por internet.

El cine para adultos siempre ha sido un ariete polémico del mundo audiovisual. Sexo duro, softporn, sexo oral. Los ojos españoles siempre han escudriñado el porno. Ahora, en la época de las manadas, mucho más.

Las manadas son, para la Real Academia Española, “conjuntos de ciertos animales de una misma especie que andan reunidos. Manada de pavos, de lobos”. Las manadas son, para la sociedad, hombres jóvenes que actúan en grupo y que entienden las relaciones sexuales con una agresividad y desprecio aprendidas de la ficción. Pero sin comprender que detrás de ella hay un guión. Sin discernir el arte de la realidad. Sin pensar que esos estándares están editados. Que la normalidad es otra cosa.

Sin evidencia científica pero con polémica

No hay evidencia científica que relacione el consumo de pornografía con las agresiones sexuales. Ni siquiera un consenso académico. Sin embargo, bastantes médicos, sexólogos y psiquiatras apuntan en esa dirección. Los profesionales de la industria, claro, se sacuden el sambenito.

En plena ola del feminismo, cuando las mujeres y sus derechos fácticos comienzan a ganar terreno, ¿cómo criticar una única arista como es la pornografía? EL ESPAÑOL habla con actrices de cine para adultos, directoras porno, psicólogas infantiles y médicos especialistas en la materia para tratar de desenmarañar la incógnita del papel que juega el porno en el aumento de brutales agresiones sexuales.

La Manada -con la víctima de San Fermín y la de Pozoblanco-, los militares acusados de violación grupal a una compañera en Bobadilla (Málaga), las agresiones sexuales en grupo a dos chicas en Asturias y Salamanca, los universitarios amenazando con ‘hacer una manada’ a una compañera. No son pocos los casos que saltan a los titulares. Que retratan a la España de hoy y la remachan poniendo sus vergüenzas en primera plana.

一“La pornografía es un reflejo de lo que pasa en la sociedad”, afirma la intérprete de cine X Irina Vega. “Si hay mucho porno machista es porque la sociedad es machista. Ahora, como hay una corriente más feminista, está surgiendo un porno más feminista, es lo natural. No creo que la gente cambie su sexualidad por influencia del porno. No tiene que ser educativo, pero puede dar ideas y mejorar tu experiencia sexual. Me gusta pensar que el porno que hago -que es feminista- pueda funcionar así. Pero aún así, no me gusta pensar que quien consume el porno no sea conscientes de que es una fantasía”.

Irina Vega es la CEO de su propia productora de porno, AltPorn4U.Irina Vega es la CEO de su propia productora de porno, AltPorn4U. Cedida

Irina tiene 35 años y es de Jávea (Alicante). Con más de una década en la industria pornográfica a sus espaldas -“unos once años”, precisa, aunque algo dubitativa-, ha pasado por distintos papeles dentro del mundillo. Se inició como actriz, lo normal para las chicas. Después dio el paso a la dirección y ahora es la CEO de su propia productora, AltPorn4U. “La manada no es una consecuencia del porno, sino de la educación, gente que no tiene respeto, ni por las mujeres ni las personas. En parte por la cultura, por parte de la educación”.

Los menores se inician en el porno a los 13 años

Pero la evidencia está ahí: los hombres que consumen pornografía cuando son niños están más inclinados a la misoginia, según un estudio presentado en la convención anual de la Asociación Estadounidense de Pediatría (APA) en agosto del año pasado. Esta investigación también dejaba patente la edad media en la que los menores -hombres- se inician en el porno: 13'37 años. En el grupo en el que se realizó el estudio, el consumidor más joven tenía 5 años en su primera vez. El mayor, 26.

Otra investigación, esta vez del Colegio Americano de Psicólogos, apuntalaba la imagen que se tiene del consumidor de cine para adultos: es normalmente un hombre. Un 79% de los hombres entre 18 y 30 años consumía porno una vez al mes y un 63% lo hacía más de una vez por semana. La cifra bajaba estrepitosamente en el caso de las mujeres del mismo rango de edad: un 34% veía escenas X una vez al mes y un 19%, más de una vez por semana.

"El fin del porno es hacerte pajas"

Lucía Fernández también es actriz porno. Ella lleva relativamente poco tiempo dedicándose a este tipo de cine, un año y medio. Pero, en una industria así, lo suficiente para curtirse. Es asturiana y se muestra muy clara en sus declaraciones a la reportera: “El porno no es para educar, sino para alimentar unas fantasías. El fin último del porno es hacerse pajas. No tiene por qué educar, puedes hacerlo de una manera u otra. Cubres necesidades”.

一¿Qué opinas de los estudios que relacionan la misoginia con el consumo de porno?

一”Pues que hay gente que está perturbada, que tiene una tara. No creo que sea una relación de causa y efecto, o, al menos, no creo que no lo debiera de ser. Sobre todo porque no creo que el porno sea el único foco de alimentación de esta tara”.

La pornografía sufre de un estigma del que, poco a poco, ya se liberó el mundo de los videojuegos. La violencia en el juego parecía que tendría su efecto en la vida real. En este ámbito parece que se terminaron las polémicas: los últimos estudios certificaban que no había una correlación. Ante una evidencia inapelable: su comparación con el cine.

Sigue leyendo el reportaje en EL ESPAÑOL

Comentarios