“Pablo Ibar asesinó a mi hermana; España debe asumir que es un criminal”

Deborah Bowie habla por primera vez para un medio español: "Deberían estar enfadados por que usen sus impuestos para apoyar a un asesino"

“Pablo Ibar asesinó a mi hermana; España debe asumir que es un criminal” - EL ESPAÑOL
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Un reportaje de José Gallego Espina publicado en EL ESPAÑOL

Deborah Bowie estaba embarazada de nueve meses cuando le comunicaron que su hermana Sharon Anderson, su “mejor amiga y confidente”,había sido encontrada muerta de dos disparos en la cabeza tras pasar varios días desaparecida. Del impacto de la noticia tuvo que ser ingresada de urgencias y dio a luz. Aquel 26 de junio de 1994 empezó un calvario que ha durado un cuarto de siglo y que, por el camino, ha consumido también a su familia. 

Su madre falleció de cáncer en 2017 esperando la tercera repetición del juicio del asesino de Sharon, Pablo Ibar, según el veredicto alcanzado ayer por unanimidad por el tercer jurado que revisa su caso. Ellas nunca dudaron de la culpabilidad del este joven estadounidense, con nacionalidad también española, que tenía 22 años entonces. 

Cuando escucha la palabra España se pone tensa. Le ha costado conceder esta entrevista. Está indignada por la forma en que se ha contado su historia allí. “Es la primera vez en 25 años que un periódico español me llama para escuchar la versión de las víctimas”, lamenta. “Y sí hay pruebas”, subraya.

No quiere elegir entre la cadena perpetua o la pena capital. “Lo que decida el jurado estará bien”, dice. Y lo siente por la familia de Ibar, de los que reconoce que “no tienen la culpa”. “Les recomiendo que recen por su alma”. A su mujer, Tanya, en cambio, la acusa de “mentir” y le aconseja que busque “ayuda psiquiátrica” por haberse casado con un condenado por asesinato.

– ¿Cómo se siente tras el veredicto? 

Abrumada. Ha sido agotador. 25 años yendo a cada juicio, aunque a este último no he podido ir tanto porque tengo un hijo con necesidades especiales. Ha sido emocionalmente agotador. Mi madre murió en 2017 de cáncer. Ha sido un día triste y difícil. Muchas emociones. 

– Su madre murió esperando el nuevo juicio. 

Sí. Ella creía que era culpable y se ponía mala de tener que volver al tribunal de nuevo. Nunca tuvimos dudas ni ella ni yo sobre la culpabilidad de Ibar. Y tener que pasar por todo esto durante 25 años…

Deborah y su hermana Sharon de pequeñas.

– ¿Cree que este largo proceso afectó a su salud? 

Absolutamente. Mi madre fumaba y nunca lo dejó. El asesinato de mi hermana y todos estos años de juicios pasaron un peaje a su salud. Tuvo cáncer de pulmón, de vejiga y de pecho, todo a la vez. Fue duro verla pasar por eso. Y antes de morir, ella sabía que teníamos que volver a otro juicio. Estábamos esperando la fecha. Estoy agradecida de que al final no tuvo que pasar por esto otra vez más. 

El caso se remonta a 1994. Junto a Sharon fueron tiroteados por la espalda su amiga Marie Rogers (24) y Casimir Sucharski (48), dueño de un famoso local nocturno de Miami, cuando se encontraban en la casa del empresario tras una noche de fiesta. Una cámara grabó lo ocurrido y captó un rostro. La policía lo atribuyó a Ibar y encontró a un vecino del asesinado que lo identificó. Desde entonces ha habido tres juicios contra él. El último, en 2000, lo condenó a muerte, pero en 2016 la Corte Suprema de Florida ordenó repetir el proceso al entender que el acusado careció de su derecho a una defensa justa, al reconocer su exabogado que no hizo su trabajo correctamente. Este sábado fue declarado culpable por un nuevo jurado.

– ¿Este veredicto hace justicia?

No sé si el veredicto hace justicia. Lo difícil de un juicio por asesinato es que nunca puedes cambiar lo que sucedió. Mi hermana se ha ido. Con 25 años. Él arrancó su vida y su futuro. ¿Es justa la condena? Sí. ¿Cambia algo? ¿Puedo tener paz? Es difícil tener paz después de ser arrastrada juicio tras juicio a escuchar tantas mentiras. Es difícil no sentir odio.

– En febrero el jurado deberá decidir entre cadena perpetua y la pena capital. ¿Qué espera?

Espero que nunca salga. Estaré bien con lo que decida el jurado, pero él nunca debería salir de la cárcel. Nunca por el resto de su vida. Hizo algo horrible. Arrebató la vida de tres personas. El precio que debe pagar por matarles depende del jurado. Él no quiere asumir su responsabilidad. Y la gente en España no quiere aceptar la realidad. Mató tres personas.

Pablo Ibar, en el corredor de la muerte.

– ¿Cree que es necesaria una muerte para hacer justicia?

No lo sé, pero es muy irrespetuoso que alguien que no esté en mi situación me diga lo que debo sentir. Si fuera su hermana a la que le hubieran disparado dos veces en la cabeza, ¿cómo se sentiría? Siempre tendré esa imagen en mi cabeza. No dormir, mirar por una ventana o soñar despierta sin pensar en Ibar disparando a mi hermana. 

– Ha mencionado a España. Creo que no está muy contenta con la forma en que los medios españoles hemos tratado este caso. ¿Por qué? 

Por dónde empiezo... Todo lo que he visto publicado allí ha estado plagado de mentiras. El periodismo consiste en contar los dos lados de la noticia. Eres la primera persona de un medio español que me llama. Es la primera vez que hablo desde los medios de comunicación españoles. Bueno, hace mucho tiempo, cinco años creo, hice una entrevista en vídeo para alguien en una cafetería [se refiere a una entrevista emitida en La Sexta en 2016]. ¿Cómo se puede cubrir un asesinato sin hablar con la fiscalía o con las familias de las víctimas? Los medios españoles han amplificado cada mentira que Ibar y su familia han contado. Ahora hay un equipo de Netflix que quiere hacer un documental. Espero que hagan justicia. Al menos ellos han contactado con las víctimas. No se puede cubrir un caso así sólo escuchando a la familia Ibar. Eso no es periodismo, es basura.

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