Una niña se enfrenta a la menopausia con tan sólo cinco años de edad

Una niña se enfrenta a la menopausia con tan sólo cinco años de edad
photo_camera Una niña se enfrenta a la menopausia con tan sólo cinco años de edad

Según recoge Informativos Telecinco, Emily Dover, una niña de 5 años que vive en New South Wales (Australia), sufre un trastorno en sus glándulas suprarrenales que le ha llevado a tener a la menopausia, tras pasar por una rápida etapa de maduración sexual.

Emily contaba con tan sólo 2 años cuando vio cómo le crecieron los pechos. Después, a los 4 menstruó por primera vez y actualmente está atravesando la menopausia. 

La pequeña tiene el síndrome de Addison, que se produce cuando las glándulas suprarrenales no producen suficientes hormonas. Esta enfermedad suele ser a consecuencia de un problema en el sistema inmunitario debido a que el sistema inmunológico ataca equivocadamente sus propios tejidos y daña las glándulas suprarrenales.

Por eso, cuando a Emily le creció el busto, también comenzó a transpirar con olor y a tener acné, como si fuera una adolescente. Actualmente, sufre en el cuerpo lo mismo que una mujer con 50 años. 

“No ha tenido la oportunidad de ser una niña” se lamenta su madre, Tam. Los padres de la pequeña han reaccionado con calma a los problemas de salud de su hija, y tratan que ella se sienta como una niña de su edad aunque Emily sabe que su cuerpo es diferente al de otras niñas de su edad, pero no comprende por qué.

A Emily le diagnosticaron la enfermedad de Addison cuando le realizaron un análisis de sangre que arrojó que la niña tenía el mismo nivel de hormonas que una mujer embarazada.

Además, el desarrolló de pubertad precoz trae consigo ahiperplasia suprarrenal congénita, autismo, trastorno de procesamiento sensorial y ansiedad.

Emily debe iniciar la terapia de reemplazo hormonal, lo que le obliga a recibir una inyección cada tres meses.

ENFERMEDAD DE ADDISON

Según recoge The Sun, la enfermedad de Addison es un trastorno poco frecuente de las glándulas suprarrenales, que se sitúan en la parte superior de los riñones.

Los primeros síntomas incluyen fatiga, estado de ánimo bajo, aumento primero y pérdida de apetito. Con el tiempo, los pacientes pueden desarrollar

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