Según recoge Informativos Telecinco, vivió cinco días con el cadáver de su hermano en la misma casa, en Las Rehoyas, Gran Canaria. No se dio cuenta, según explicó a los agentes que se personaron en el domicilio después de que una persona avisara porque hacía días que no podía contactar con el fallecido.
El hombre habría fallecido la semana pasada, pero su hermano abrió la puerta a la Policía Local sin explicarse la presencia de los agentes. Estos entraron en el domicilio y encontraron un cuerpo sin vida en una habitación cerrada, según ha publicado Las Provincias.
El hombre explicó que había oído toser algunos días atrás a su hermano, pero que no sabía nada, porque entre ellos la relación no era buena. Ante la pregunta de los agentes de si no había notado nada raro o el mal olor por la descomposición del cuerpo este respondió que la habitación tenía una ventana que estaba abierta.
La Policía ha abierto una investigación para esclarecer el fallecimiento y se le practicará la autopsia que dará pistas concluyentes sobre las causas del deceso.
