Según recoge El Caso, la modelo polaca Aleksandra Sadowska quería parecerse a su artista de rap preferido y acudió a un estudio de tatuajes para hacerse un tattoo arriesgado. La chica de 25 años ha sido tatuada en Varsovia, Polonia, por un tatuador que se hace llamar Piotr A.
Aleksandra pidió tatuarse el blanco de los ojos de color negro para parecerse a su artista preferido, el rapero polaco Popek. Inicialmente el tatuador le dijo que el dolor que experimentaba era normal y que podía tomar analgésicos. La realidad, sin embargo, es que no conocía la técnica para llevar a cabo este tipo de trabajo.
El diagnóstico de los médicos se encuentra en las antípodas de la opinión del tatuador. Fuentes sanitarias han informado que la modelo se quedará completamente ciega: durante el procedimiento de tatuarse Aleksandra perdió la visión del ojo derecho y parte del ojo izquierdo.
La modelo se ha sometido a tres procedimientos médicos destinados a restaurar su capacidad para ver, pero los médicos han descubierto que la tinta ha penetrado en el tejido ocular. Sentencian que no hay esperanza de recuperar la visión y que poco a poco acabará completamente ciega. "No me encerraré en el sótano de casa a deprimirme. Siento mucha tristeza, pero vivo", ha declarado Aleksandra.
La tinta utilizada sólo es adecuada para tatuajes en la piel y no puede entrar en contacto con los globos oculares. Los abogados de Aleksandra han declarado a los medios polacos: "Hay una evidencia clara de que el tatuador no sabía cómo realizar un procedimiento tan delicado". El profesional se enfrenta a penas de hasta tres años de prisión por procedimiento fraudulento.
