José Alberto, el corredor de fondo que volcó toda su vida en el hijo enfermo al que mató

El parricida de Getafe "era incapaz de imaginar un mundo sin su niño"; este martes acabó con la vida de sus dos hijos y dejó una nota en la que decía: "No quiero que sufran

José Alberto, el corredor de fondo que volcó toda su vida en el hijo enfermo al que mató
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Según informa Gonzalo Araluce en EL ESPAÑOL, por las tardes, en la plaza de la Magdalena de Getafe y junto a la catedral, era habitual que los transeúntes se encontrasen con un padre de familia, "un hombre tímido", cuidando de sus dos hijos. El mayor, de 13 años, sufría una parálisis cerebral y disfrutaba de los rayos del sol siempre que el tiempo lo permitiese; la menor, de 8, era una chiquilla inquieta, melena rizada de color castaño y una sonrisa permanente. La estampa era habitual hasta fechas muy recientes. Por eso, pocos daban crédito a la información que esta semana ha sacudido el municipio madrileño: aquel hombre era José Alberto Gálvez,el parricida que el martes acabó con la vida de sus dos hijos para arrojarse finalmente en la vía ferroviaria al paso del tren.

Es mediodía del miércoles y la tragedia salta de boca en boca entre los vecinos que viven cerca de la plaza de Benjamín Palencia. Porque es en este lugar, en el portal número 8, donde sucedió la tragedia.

La secuencia del suceso arranca dentro de esta vivienda. Como adelantó EL ESPAÑOL, José Alberto Gálvez ahogó a sus dos hijos en la bañera, tendió sus cuerpos en la cama y prendió fuego a la vivienda. Acto seguido, se marchó hasta la próxima estación de Getafe Industrial y se arrojó a las vías ferroviarias al paso de un tren.

Eran las 20.15 cuando los vecinos alertaron del incendio. Raquel, la madre de los dos niños y pareja de José Alberto, gritaba angustiada en el exterior. Cedió sus llaves a los Bomberos, que no tardaron en sofocar el incendio. En el interior de la vivienda se encontraron con el horror. Sólo pudieron certificar la muerte de los dos menores.

"¡Mis hijos!", clamaba Raquel, sacudida por un ataque de ansiedad. Los sanitarios la trasladaron al Ayuntamiento, donde se encontró con unos familiares. En cuestión de un instante había perdido a su marido y a sus dos hijos.

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