Según recoge Informativos Telecinco, la británica Lucy Godfrey se enteró de que tenía un tumor cerebral al estar embarazada ya que por su estado le realizaron una resonancia magnética en lugar de una tomografía computarizada que no habría captado su enfermedad.
"Siempre le digo a todos que mi bebé me salvó la vida", asegura Lucy que fue diagnosticada en diciembre de 2012. Cuando su hijo, Brandon, tenía cuatro meses de edad, se sometió a la primera de las tres cirugías cerebrales. Los resultados de la biopsia mostraron que el tumor era un astrocitoma de bajo grado, según lo recoge The Daily Mirror.
Cuando en diciembre de 2012 el comunicaron a Lucy que tenía un tumor cerebral, su primer pensamiento fue si iba a poder tener a su hijo. "Yo estaba embarazada de 14 semanas y, apenas una semana antes, habíamos estado diciendo a todos nuestra feliz noticia, luego tuve que dar la noticia de que tenía un tumor cerebral", ha recordado Lucy quien asegura que la enfermedad sombreó el bonito momento de su embarazo.
El doctor de Lucy estuvo de acuerdo en que podría someterse a una cirugía después de que naciera su bebé, ya que estaba seguro de que el tumor era de crecimiento lento y de bajo grado. Lucy fue informada por los médicos de que su tumor probablemente había estado creciendo desde que era un bebé y que incluso podría haber nacido con él.
Dos años después de su diagnóstico inicial, Lucy fue informada de que el tumor se había vuelto canceroso. Durante una exploración de rutina después de su última operación, le dijeron que el tumor se había convertido en un glioblastoma de grado 4, el tumor cerebral agresivo más común en adultos, con un pronóstico promedio de 12-18 meses.
Ahora está decidida a hacer que cada segundo cuente con su familia y quiere ayudar a The Brain Tumor Charity aumentar la conciencia y apoyar a otros que viven con esta cruel enfermedad.
"Tuve seis semanas de radioterapia intensiva y estaré en tratamiento de quimioterapia de Temozolomida para toda la vida. Mis últimas tres exploraciones desde mi radioterapia han sido claras y estoy desafiando las probabilidades. Aunque el futuro es incierto, hago todo lo posible para mantenerme positivo".
"Apreciamos cada día juntos como una familia y estamos disfrutando tanto como podemos". Ahora Lucy quiere ayudar a otros enfermos compartiendo su historia.
"The Brain Tumor Charity ha sido una línea de vida para mí y he hecho algunos amigos encantadores a través de su grupo de Facebook", ha afirmado Lucy. Sarah Lindsell, la directora ejecutiva de la organización, dijo: "Estamos muy agradecidos con Lucy por su apoyo en este camino que nos une".
